Redacción 2001 | Heilis Oriana González
Una vez que se emprende la decisión de hacer vida en pareja comienzan las discusiones sobre la familia con la que se pasarán fechas importantes. En todas las relaciones ocurre.
No existe tal cosa como una receta única, a cada nueva familia le toca encontrar la manera de lidiar con esta situación. Para nadie es un secreto que las familias de origen de cada uno van a presionar para que pasen las fiestas con ellos.
Una pareja debe conversar esta situación mucho antes de que lleguen las fiestas: es necesario que se escuchen mutuamente, revisen cuáles son sus preferencias sobre esos días, y por qué no, comenzar su propia tradición de navidad, que no necesariamente tiene que ser pasarla con las familias de origen.
¿Cómo llegar a un acuerdo para compartir noche buena y año nuevo?
María Esther Franco de Rivero, psicóloga especialista en Asesoramiento Desarrollo Humano, Terapia Familiar y de Pareja explica: “este es un acuerdo muy común. Algunas parejas inclusive se plantean por ejemplo, pasar la navidad en casa de ella y el año nuevo en casa de él, y al año siguiente invertirlo para que pueda compartir con ambas familias las dos fechas”.
La especialista añadió que “esto lo pautan así porque para algunas personas una de estas fechas es más importante que la otra, para algunos la navidad por los niños y para otros el fin de año con sus padres por ejemplo”.
¿Cómo pasar las dos fechas o alguna de las dos en otra casa?
La terapeuta añadió “en caso que hablemos de la familia de uno de los cónyuges se recomienda compartir cuáles son las costumbres y tradiciones que se llevan a cabo en la celebración en esa familia, para que no hayan sorpresas desagradables o dejen de cumplirse algunos rituales que puedan ser importantes ara la persona que se está integrando a la celebración”.
Rivero expresó que “si nos referimos a casa de alguien distinto de la familia de origen, esto debe estar acordado con mucho respeto y es importante concertar si ambos se sienten cómodos con esta decisión de dejar de compartir con su propia familia para reunirse con alguien más a quien no les una un lazo importante, tales como compañeros de trabajo, vecinos o un restaurante”.
María Esther Franco de Rivero puntualizó además que “lo que sí es cierto es que ahora, a pesar de haber constituido una nueva unión, cada quien viene con paquete completo, familia incluida, pero esto va a implicar hacer acuerdos y negociaciones en fechas y eventos importantes, tratando de que ambos se sientan cómodos y respetados en sus necesidades afectivas y emocionales, sin que haya uno que se imponga sobre el otro”.
¿Cómo mediar?
Leonor Consuelo Andrade Castillo, Psicoterapeuta comentó lo siguiente: “la verdad no hablaría de mediación, sino más bien de una negociación que sería deseable que terminara en un consenso. En la mediación hay un tercero que facilita llegar a un acuerdo. Este no es el caso”.
La especialista explicó que en una negociación “ambas partes cederán algo para llegar a un acuerdo y el consenso se va construyendo con aquellos aspectos en los cuales ambas partes están de acuerdo y se comprometen a llevarlo a la acción”.
Castillo señaló que cuando se trata de mantener la armonía en pareja “es indispensable escuchar a la otra persona, expresar cualquier duda que podamos tener, parafrasear para asegurarnos que estamos entendiendo lo que la otra persona quiere decir. Estar claros en cuál es el objetivo que tenemos como pareja, observar cómo nos sen- timos con las opciones que vayamos encontrando y expresarle a nuestra pareja cómo nos sentimos, y escucharlo también”.
La psicoterapeuta puntualizó que “el conflicto por las diferencias de opinión no es una batalla en la que se debe convencer al otro. Es una oportunidad para hacer ajustes y encontrar una nueva forma de funcionar como pareja que satisfaga a ambos y de esa manera crecer y reforzar el vínculo de la pareja”.
¿Cómo evitar problemas?
Leonor Consuelo Andrade Castillo aseguró que “aunque parezca paradójico, evitar los problemas, no discutir, mirar para otro lado, hacernos los locos en nada ayuda a vivir las fiestas navideñas en paz. Evitar muchas veces trae como consecuencia que tengamos acumulados malestares que van a salir tarde o temprano, seguramente en el momento más inoportuno”.
Castillo recalcó que “lo primero es reconocer que tenemos una diferencia. Una vez que estamos claros en la existencia del problema, que lo podemos ver entonces necesitamos un momento para hablarlo. Es importante que ambos tengan una buena disposición a conversar”.
La especialista señaló que “se puede dar el caso que se escuchen primero, dejen pasar unos días y digieran lo que su pareja expresó y se reúnan de nuevo para que cada uno exprese su propuesta de ‘solución’ y luego de escucharse, llegar a un acuerdo, que pudiera ser aceptar la totalidad de una de las dos propuestas o acordar una tercera opción que sea producto de la negociación entre ambos”. El consejo es válido para todos.
2019-12-21
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