2001online.com | HEILIS ORIANA GONZÁLEZ / [email protected]
Familia. Muchos fueron los cambios sociales y económicos después de la llegada de la pandemia por el virus Covid-19 al país. Las familias quedaron afectadas porque sus rutinas fueron “sacudidas” por las nuevas reglas, roles y conductas.
La psicóloga Anaís Bolívar expresa que “en el caso de Venezuela es muy particular porque nosotros ya estábamos acostumbrados de alguna manera a que las familias estén divididas en diferentes países y el tema de que nos comunicamos o tenemos el vínculo a través de las redes sociales o el internet, es algo ya normal”.
Señaló que la cuarentena no es favorable “porque la gran parte de la gente que está aquí, vive de lo que mandan sus familiares y las remesas. Hay muchas personas que se han tenido que regresar sin nada y los que están aquí tampoco tienen fuentes de ingreso”.
Dice que “hay otra gente que está mejor económicamente, pero también está afectada, o que han tenido que quedarse dividida, porque al visitar a uno de los hijos o haciendo un trabajo, se han quedado varados en otros países”.
Bolívar dijo que se han extremado las posiciones individuales. A su juicio llega un momento en que la actitud es “sálvese quien pueda ante una situación de riesgo de vida”.
Roles. La especialista afirmó que “las funciones siguen siendo las mismas. No hay intercambio de roles. Lo que pasa en confinamiento, es que las personas más cercanas, se encuentran de nuevo después de pasar todo el día en tantas actividades. Y eso más bien afecta las relaciones para aquellas parejas que tienen conflictos y que no los han resuelto. Y eso, por supuesto, impacta la vida familiar. Porque si la pareja está mal los hijos tienen consecuencias”.
Aseguró que no hay menos machismo ni hay más participación del hombre. “Venezuela es una sociedad matricentrada (enfocada en la mujer), no machista. Al contrario, la que dirige la casa a pesar de que el hombre también trabaja y provee es la mujer”.
La psicóloga añadió que “si los dos están sin trabajo y tienen dos hijos pequeños, ya no es el tema del machismo o quién va a mandar, sino cómo van a resolver. Pero generalmente la mujer tiene más posibilidades o más flexibilidad sobre otros trabajos que los hombres. Por ejemplo, limpiar una casa o algo así, aunque ahora hay hombres que también están en eso de la limpieza para poder sobrevivir, pero no hay tantas opciones para ellos”.
Bolívar recalcó que el balance de lo que está pasando en Venezuela, es que ahora es que se va a ver las consecuencias de lo que estamos viviendo. “Hay muchas fuentes de empleo que han desaparecido en el tiempo de la cuarentena. Los empleos informales y muchas familias vivían de eso, del día a día. El venezolano no vive de un salario mínimo porque eso es prácticamente imposible, nosotros no llegamos ni a dos dólares en este momento”.
Problemas varios. La experta mencionó que “generalmente las personas tienen varios empleos o trabajos alternos. El que no vende ponquecito, vende ropa y el que no vende ropa, trabaja de taxista en la noche. Pero todos esos trabajos alternos están eliminados en la cuarentena. Han surgido nuevos empleos, como por ejemplo los deliverys”.
Bolívar manifestó que se ha vuelto muy complicado cumplir al menos con la cesta básica, el tema de las tareas en casa. “En San Antonio de Los Altos hubo problemas con los padres que no supieron manejar el problema con sus hijos y las tareas. Los padres no saben manejar a los hijos, porque la verdad es que no estaban con ellos, porque pasan todo el día en el trabajo, los chamos en el colegio y ellos con sus cuidadores principales o con un vecino”.
Hay otros problemas como la escasez del agua, la falta de electricidad, las fallas de internet y ahora lo sucedido con Directv. “Acá no hay ni siquiera una distracción, la gente no tiene para comprar Netflix o no tienen internet en la casa”, criticó la psicóloga.
Anaís Bolívar indicó que “la gente está obligada a resolver sus conflictos de manera interna como familia, a veces hasta sin ayuda. Tengo amigos que se han separado, también tengo casos de gente que quedó varada en el exterior. Y en mi caso particular me contactó un hombre que tenía años que no sabía de él para pedirme matrimonio”.
Incertidumbre
“La presión que hay de que vamos a perder la vida en cualquier momento, si no infectados del virus que no se sabe qué podamos pasar. Hace que la gente tome decisiones importantes que no habían tomado antes”.
Anaís Bolívar
Psicóloga
Cambios
“La mujer ha aprendido a delegar funciones, claro nunca falta un hombre machista, que no le guste fregar un plato, pero hemos adquirido la habilidad de usar un buen lenguaje de amor para pedir las cosas a su pareja”.
Hjenny Flores
Psicóloga
2020-08-10
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