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El Venerable, siete décadas de espera para ser beato

Martes, 24 de octubre de 2017 a las 08:00 pm
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Nayzai Saavedra

Un milagro separa aún a José Gregorio Hernández de su beatificación, paso previo a la canonización. El análisis de un testimonio verificado y reconocido es vital para que la Santa Sede proceda.

Sin embargo, los prodigios enviados originalmente por los representantes de la Iglesia en el país fueron descartados. Posterior a la beatificación, se necesitará de otro milagro comprobado para lograr su santificación. Los pasos para llegar a la máxima estimación de la iglesia son Siervo de Dios, Venerable, Beato y Santo.

En proceso. En el marco del festejo de los 153 años de su nacimiento, monseñor Roberto Lückert, obispo emérito de Coro, indicó que se debe de tomar en cuenta que una de las fases más difíciles, que es el proceso por la vía de virtudes heroicas, ya fue aprobada.

La Iglesia Católica en Venezuela inició en el año 1949 el proceso de beatificación y canonización, conducido por el entonces arzobispo de Caracas, monseñor Lucas Guillermo Castillo, ante la Santa Sede. Luego de iniciar el proceso y completados los primeros casos, José Gregorio Hernández fue nombrado “Venerable” por el papa Juan Pablo II, el 16 de enero de 1986, lo cual permitió seguir adelante hacia la beatificación. De completarse el proceso, se convertiría en el primer santo de procedencia venezolana.

Todos tenemos virtudes cristianas normales. Uno que va a la santidad debe tenerlas en grado heroico. Es decir, que se pueda sentir a través de los testimonios que fue más que ejemplar, ejemplarísimo”, explicó monseñor Lückert, recordando que sólo falta es el sello de Dios, el milagro. Este tiene que ser un hecho no explicable por causa naturales y que se atribuye a la intercesión de un siervo de Dios.

El milagro. La mayoría de los milagros son de naturaleza médica, pero es posible investigar algunos de otro tipo. Este hecho debe ser físico. El obispo del lugar donde haya ocurrido el inexplicable suceso tiene que encargarse de su investigación, recopilando todas las pruebas correspondientes.

Los milagros atribuidos se estudian en una Comisión de peritos (formada por médicos, si el favor es una curación), después se eleva a un Congreso especial de los teólogos y por último en la Congregación de los padres cardenales y obispos.

Si el Santo Padre lo estima conveniente, emite un decreto por el que se aprueba el milagro y se ordena la beatificación.

Hay que tomar en cuenta que en muchas ocasiones los devotos confunden “favores” con “milagros”, el monseñor Lückert aclaró que no se trata de lo mismo.

A tomar en cuenta. El obispo emérito de Coro indicó que aún no saben dónde van a realizar el acto cuando se apruebe la beatificación -porque suele hacerse en el lugar en el que vivió-, el lugar tiene que ser propicio, ya que tienen la certeza de que muchas personas del interior y de otros países vendrán a la ceremonia.

En el mes de septiembre de este año corrió el rumor de que el proceso se había completado. La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) lo desmintió y explicó que se debió a una confusión.

Muchos creen que la tardanza en la beatificación y canonización tiene que ver con que los santeros utilizan su imagen en los altares, sin embargo, monseñor Lückert y monseñor Tulio Ramírez -quien lleva la causa- niegan que este sea el caso.

Vida y labor encomiable. José G. Hernández fue un estudiante sobresaliente y un científico notable. Doctorado en Medicina en 1888. Luego de un postgrado en París se dedicó al ejercicio profesional y a la docencia universitaria. Fundó las cátedras de Histología, Fisiología Experimental y Bacteriología en la Universidad Central de Venezuela. Se distinguió por su fe inquebrantable, castidad perfecta, humildad, sencillez profunda, excelencia profesional, su tierna devoción a la Virgen y gran amor a Dios y al prójimo. En dos oportunidades quiso hacerse sacerdote, pero su condición física resultó un impedimento.

El 29 de junio de 1919, mientras llevaba medicinas a un enfermo necesitado, un automóvil puso fin a su vida.

Colabora. El cardenal Jorge Urosa Savino exhorta a los fieles católicos que estén en conocimiento de un hecho presuntamente milagroso a enviar la más completa información escrita sobre ello a monseñorJorge Villasmil Torres, vice-postulador, a la Conferencia Episcopal Venezolana. Frente a la Urb. Juan Pablo II Av. Teherán. Montalbán. Caracas-Venezuela (0414. 330.22.21). También a la Oficina de la Causa. En el Edificio París, PB-1. Plaza La Candelaria, Caracas-Venezuela, teléfonos 0212 578.3014 / 35.97.

Celebración. En el pueblo de Isnotú, estado Trujillo, se han efectuado actividades religiosas y culturales desde el 1 de este mes para homenajear al Médico de los Pobres. La eucarística será efectuada a las 10:00 am en la iglesia de Isnotú por el obispo de Trujillo Oswaldo Azuaje

2017-10-25