Ana Karina Delgado
Habitantes y peatones de La Parroquia Caricuao hacen diversas denuncias acerca de la vialidad, el suministro de agua, la seguridad, falta de transporte y aumentos ilegales del precio del pasaje. Afirman que la situación es insostenible y desesperante.
Elisa Vida, de 70 años, comunicó que en ocasiones toda la parroquia se queda sin agua por al menos ocho días, y que el suministro del vital líquido solo llega de una a dos horas semanal, asegura que no hay ningún ente que de respuestas o informe respecto al problema.
Para subsistir con el abastecimiento irregular que afecta el sector, Joel Bastidas comentó que una vez a la semana su familia debe llenar tobos y pipotes, con la preocupación de cuándo llegará nuevamente el agua, y en algunas ocasiones compran botellones, sin embargo declara que son sumamente costosos y no los puede adquirir con regularidad.
Los habitantes también denunciaron largas colas que se hacen en las paradas de unidades públicas y metrobuses, notifican que son pocas las camionetas que están en funcionamiento y el Metro de Caracas no trabaja de forma eficaz, por lo que se ven obligados a esperar.
Vidal afirmó que no existe respeto para los adultos mayores en las unidades de transporte, ha sido empujada y maltratada intentando ir a su casa (UD4), acusa a los dueños de las unidades de subir de forma arbitraria el pasaje. Asimismo declara que siendo una persona de la tercera edad, baja a pie todos los días de su casa para ahorrarse un poco de dinero.
Otro problema que afecta gravemente a la parroquia es la inseguridad, la falta de patrullaje y de alumbrado público, estos también son factores que -según los habitantes- favorecen los delitos y las fechorías de los delincuentes.
El habitante del sector, José Abreu, de 59 años, contó que hace 20 años, él hacía ejercicio por la zona, actualmente tiene miedo de estar en las calles a horas tardías.
La situación de incertidumbre ha llegado hasta el límite de que individuos, como Alvis Bastidas, declaren que ya no puede salir a la calle sino es por obligación.
Más incidencias. Los servicios públicos no funcionan de forma eficiente en la comunidad, las calles están oscuras. A demás grandes botes de basura y cloacas destapadas se ven en la vías, proliferando infecciones y enfermedades a la población.
Vecinos se quejan de que la ciudad está cada vez más sucia y el aire que respiran está contaminado, declaran que el aseo recoge los desechos aproximadamente cada ocho días y en algunas calles ni siquiera pasa.
Alimentación. El vecino Omar Castro informó que en Caricuao, como en otras parroquias del país, hay que tomar un número a las 5:00 am para poder comprar, sin embargo, en muchas ocasiones -a pesar de los intentos y sacrificios de los ciudadanos de madrugar y exponerse- el camión no llega.
Castro, y múltiples personas que se encontraban en las afueras de un supermercado comentaron que es repetitivo irse con las manos vacías. Muchos visitan los establecimientos diariamente a la espera de comida debido a que solo se les permite comprar en su zona, dificultando y limitando la obtención de alimentos.
2018-06-10
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