Criss Monterrey
La reciente captura de tres antisociales dedicados a robar casas en la Urbanización El Junko (Km 19 del estado Vargas) no fue casualidad sino un trabajo mancomunado entre los habitantes de la zona y las autoridades. Los altos índices de delincuencia en la zona obligaron a los vecinos a estar alertas y en red, lo que desembocó en el desmantelamiento de una banda que mantenía azotado al otrora tranquilo lugar de montaña.
Desde hace varios años comenzaron a hacerse habituales los rumores de que alguna quinta cercana había sido vaciada en la madrugada. Las edades avanzadas de muchos de los habitantes de El Junko hicieron de la zona un blanco fácil para los delincuentes, quienes además, descubrieron dentro de la urbanización una carretera pirata hacia el kilómetro 16 de El Junquito. A través de esta trocha huían con el botín sin levantar sospechas, pues evadían el punto de control ubicado en la entrada de la urbanización.
Casos recientes y frecuentes de secuestros dentro de las casas empezaron a asustar a los vecinos, quienes armaron redes de comunicación y vigilancia que rindieron frutos. Fijarse en quién llega, qué hace, a qué hora y de qué forma está vestido ya no es asunto de chisme: puede incluso salvar la vida de una familia.
Tiempo récord
El viernes 18 de octubre parecía que iba a terminar como un día cualquiera en el sector El Topo de El Junko. Sin embargo Alfonso Almarza (nombre sustituido por seguridad) notó que un carro -no conocido- con cuatro ocupantes estaba detenido frente a una casa cercana.
Eran ya las 8:00 pm, lo que le pareció sospechoso. Minutos después descendió del vehículo un hombre que comenzó a merodear. Ahí aumentaron las sospechas. No hubo tiempo que perder: Almarza se comunicó vía whatsapp con el resto de los vecinos, quienes en cuestión de minutos y acompañados de pitos, cornetas y gritos se organizaron y capturaron al merodeador. Los del carro, que observaban desde cerca, huyeron.
Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana fueron contactados por los vecinos. El maleante fue entregado a los uniformados, que a su vez derivaron el caso al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). El detenido confesó formar parte de una banda que llevaba ocho años robando dentro de El Junko.
En tiempo récord y gracias a la alerta entre vecinos se evitó una posible tragedia. También la oportuna atención de las autoridades policiales permitió la captura de otros integrantes de la banda delictiva, aunque varios permanecen en fuga.
El Junquito es zona roja
Si algo preocupa a los junquiteños en general es el deterioro físico y moral al que ha sido sometida la zona: ahora se ha vuelto lugar de asesinatos, robos diarios o “botadero” de cadáveres. En agosto de 2017 unos robacasas asesinaron dentro de su quinta a José Gregorio Quintana, de 83 años, quien se encontraba junto a su trabajadora de servicio y resultó muerta también. Igualmente en agosto pero de 2015 asesinaron dentro de su casa a Antonio José Montesinos Ruiz (67), padrastro del actor Ricardo Álamo. En ambos casos los ladrones pensaron que la vivienda estaba vacía para robarla, pero terminaron matando a los dueños.
Carlos Rafael Galíndez, alias “Carlos Breaker” (líder del Tren de Aragua) fue descuartizado vivo en 2015. Sus restos aparecieron en el kilómetro 16 de la vía que comunica a Mamera con El Junquito. Esto se repite con dolorosa frecuencia, pues solo en lo que va de octubre han sido hallados tres esqueletos en el kilómetro 11 de El Junquito. El clamor general es que se tomen cartas en el asunto y vuelva la seguridad a la zona.
Gracias a los vecinos de El Topo en El Junko ya están tras las rejas Julio Yhoel Correa Castillo (29), Alexander Antonio Castillo (33) y Samuel José Castillo Oropeza (22). Durante ocho años se dedicaron al robo de residencias en el sector portando armas blancas y de fuego, con las que sometían a los propietarios golpeándolos y despojándolos de sus pertenencias. Los vehículos en los que huían del sitio aún quedan por identificar.
Durante la captura de estos robaquintas fueron incautados un arma de fuego, cargadores y municiones. También recuperaron pertenencias de algunas víctimas. Los detenidos fueron puestos a la orden de la Fiscalía 11º del Ministerio Público del Área Metropolitana de Caracas, quien debe presentar a los responsables ante la justicia.
2019-10-23
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