Hanny Morales
La Asociación Nacional de Bebidas Refrescantes (ANBER) considera “necesario que se realicen los ajustes mínimos requeridos para cubrir los incrementos de costos” asociados a la producción del agua embotellada.
En un comunicado publicado en la prensa Nacional, ANBER solicitó una reunión con Dante Rivas, superintendente del para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (SUNDDE), porque considera “que el incremento de precio es insuficiente después de 30 meses de revisión”.
Actualmente, la producción del agua embotellada cuesta el doble con respecto a noviembre de 2011, lo cual impide tener margen de ganancia y contraviene con lo establecido en la nueva Ley Orgánica de Precios Justos, afirmó ANBER en el comunicado.
“Los nuevos precios fijados por SUNDEE no reconocen la totalidad de los incrementos de costos acumulados en los últimos 30 meses”, entre los que mencionó rubros como transporte, salarios e inflación.
La asociación también advierte que en varias oportunidades solicitó al Gobierno la revisión conjunta de la situación para acordar precios que garanticen la estabilidad del sector.
ANBER especificó que el agua embotellada no es un producto de primera necesidad puesto que atiende unas ocasiones de consumo muy específicas.
“Del total del agua potable que se consume en el país, la mayoría proviene del sistema de acueductos y de botellones de más de 5 litros. Solo 13% proviene de agua embotellada en presentaciones de 5 litros o menos, y este es el único segmento sujeto a regulación de precios”, indicó.
ANBER acota que es necesario reunirse para realizar ajustes y devolverle al sector un equilibrio económico necesario para ofrecerle a los consumidores productos de excelente calidad y la continuidad a sus operaciones.