Redacción 2001.com.ve
Tener una mascota se ha convertido en un sacrificio ya que también se ven afectadas por la escasez y la inseguridad en Venezuela debido a que ya no se consiguen alimentos empaquetados ni medicinas para sus tratamientos médicos, incluso, hasta han sido secuestrados.
"Me paso días enteros recorriendo farmacias y a veces no les consigo las medicinas a mis perras. No me imagino lo que siente un paciente que puede morir por la falta de un medicamento", expresó Roselín González, dueña de cuatro perras, de las cuales, dos de ellas sufren de la tiroides y del corazón y le ha sido muy difícil conseguir sus medicamentos.
De acuerdo al director de la Asociación de la Industria de Salud Animal, Germán Campos, indicó que el inventario de productos para mascotas, aves, cerdos, bovinos y equinos se encuentran en “niveles preocupantes” y un 66% de los productos del sector no estaba disponible a finales de junio.
"Los médicos veterinarios han limitado los productos que prescriben o recurren a los de uso humano que pueden consumir las mascotas", aseguró Campos.
Asimismo, la inseguridad también se ha convertido en una fuente de extorsión.
A la señora Ana Elisa Osorio le robaron un vehículo con su perro poodle de 14 años: "Me pidieron un millón de bolívares (1.579 dólares a la tasa paralela y más de 158.000 dólares al tipo de cambio oficial) para devolverme a Balú. Les ofrecí 200.000 bolívares (casi 316 dólares en el mercado negro y más de 31.000 a la tasa oficial) y el secuestrador se burló y me preguntó que si yo lo consideraba un recogelata (indigente)", contó Osorio a la AFP. Balú nunca apareció.
Con información de AFP
2015-07-24