El gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) se pronunció hoy sobre la supuesta presencia de funcionarios de inteligencia en la marcha del miércoles pasado y señaló que con seguridad el presidente Nicolás Maduro sancionará a quienes no cumplieron la orden de acuartelamiento dada a ese grupo.
"Fue Maduro quien anunció, vamos a acuartelar", indicó el dirigente del PSUV y gobernador del estado de Anzoátegui (este), Aristóbulo Istúriz, quien agregó que ese partido respalda al mandatario y confía en su "voluntad política".
"Esa es la voluntad política del presidente Maduro que fue quien ordenó eso (…) seguro que si alguien no cumplió, el presidente Maduro es el primero que les va a aplicar sanción, Maduro en eso no le tiembla el pulso", dijo Istúriz.
El jefe de Estado admitió el domingo que en la marcha del miércoles "había un grupo de funcionarios del Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional) que incumplieron directamente las órdenes del director del Sebin de ese día acuartelarse y nadie salir a la calle".
"Eran las órdenes que teníamos, las únicas Policías y funcionarios que debían estar en las calles, como estuvieron conteniendo la violencia, era la Policía Nacional y la Guardia Nacional (policía militarizada) en una segunda línea", indicó tras señalar que las investigaciones sobre lo ocurrido "están muy avanzadas".
También apuntó que los funcionarios policiales tenían orientaciones "muy claras" de respeto a los derechos humanos aunque "hay que ver lo que es respetarle los derechos humanos a alguien que te está tirando una molotov, que te está disparando, que está tirando piedras", dijo.
"Ahora ellos dicen que eran infiltrados del Gobierno, irresponsables", dijo en alusión a las acusaciones de la oposición de que el Ejecutivo infiltró las protestas violentas que se han dado en el país en los últimos días.
La marcha que se realizó el pasado miércoles, convocada por estudiantes y opositores, culminó en hechos violentos que dejaron tres muertos y decenas de heridos, situación que degeneró en protestas en los días siguientes. EFE