Luisandra Colina | [email protected]
Salud
Los apagones se han vuelto recurrentes en el país, las consecuencias de las fallas eléctricas son tan graves que han causado la muerte de niños y adultos en los centros de salud públicos.
Obtener cifras oficiales de cuántas personas pierden la vida en una unidad de cuidados intensivos o en medio de una operación quirúrgica es algo imposible porque ningún vocero se atreve a darlas, solo se conocen por denuncias.
En los primeros meses del año, se han generado diversos apagones en varios estados del país sin mayores explicaciones, los últimos se produjeron en Caracas, Apure, Barinas, Mérida, Portuguesa, Táchira, Trujillo y Zulia.
José Manuel Olivares, diputado a la Asamblea Nacional, señaló que hasta el momento se ha confirmado la muerte, de tres personas en el estado Táchira, tres en Trujillo y seis en Bolívar, además de 20 niños recién nacidos que se encuentran en riesgo por las constantes fallas eléctricas.
Olivares, quien es médico de profesión, destaca que el “50% de los equipos eléctricos de los hospitales del país no operan bien, lo cual es de suma preocupación porque los pacientes dependen de un soporte respiratorio, de una maquina en terapia intensiva, entre otros”.
Señaló que “Hay que exigir seriedad en las acciones del Gobierno porque son responsables del tema eléctrico y de las vidas que se sigan perdiendo”.
Por su parte, Ana Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras del Distrito Capital, indicó que hasta el momento no hay información de manera oficial sobre esas muertes: “Lo que manejamos sobre los decesos es lo que ha registrado la prensa nacional, porque el boletín epidemiológico pareciera que es un secreto de ministerio”.
Contreras enfatizó que la respuesta ante un apagón debe ser inmediata. “En salud no hay tiempo de espera, no se puede esperar que se active en 15 minutos una planta, porque ya en seis minutos el paciente tiene comprometida su vida. El Estado debe garantizar que las plantas eléctricas en los centros hospitalarios respondan de manera inmediata”.
Neonatos. En el país mueren cerca de 9.000 neonatos, de 600.000 nacidos vivos. 28 hospitales tipo IV estaban protegidos con plantas eléctricas, pero en los últimos 10 años comenzaron a presentar fallas y no hay soluciones.
Muertes por fallas. En Trujillo, tres pequeños fallecieron en los últimos dos días y 20 se encuentran en riesgo por los cortes eléctricos en el Hospital Central Universitario Pedro Emilio Carrillo. En Táchira tres personas perdieron la vida, un joven de 25 años que sufrió un paro cardíaco, un niño de cuatro meses y un paciente de 76 años, en los centros de salud de Rubio, Coloncito, Colón y Pregonero.
Un apagón de cuatro horas generó la muerte de seis neonatos en el Centro Pediátrico Menca de Leoni, en Bolívar. Los trabajadores trataron de encender la planta eléctrica, pero no funcionó.
Improvisación. Winston Cabas, presidente de la Asociación Venezolana de Ingeniería Eléctrica, Mecánica y afines (Aviem), aseguró que los médicos han tenido que terminar procesos quirúrgicos alumbrando con sus celulares. “La vida de las personas ahora está en juego por la crisis del sector eléctrico”.
Asimismo desmintió que en 15 días se logre solventar las fallas eléctricas.
2018-03-15