Redacción 2001
El Observatorio Venezolano de la Salud (OVS) presentó el Reporte Nacional de la Emergencia Humanitaria Compleja en el caso específico del derecho a la Alimentación, un balance realizado al cierre del año 2018, donde queda al trasluz la grave crisis que vive Venezuela.
De acuerdo a este documento, el 94% de la población venezolana no cuenta con ingresos suficientes para pagar los precios de una canasta de alimentos y de servicios básicos por las extremas condiciones de privación económica.
Otro punto interesante señala que el 64% de los venezolanos había perdido unos 11 kg de peso entre 2016 y 2017, por el acelerado deterioro de la ingesta de alimentos en la cantidad y calidad necesaria, siendo más afectados los niños y las mujeres.
Por otra parte sostiene que la combinación de emergencias en alimentación y salud disminuye las probabilidades de que los niños más pequeños y las embarazadas que sufren de desnutrición severa tengan oportunidad de sobrevivir.
Otros de los puntos resaltantes de este estudio tiene que ver en que el 80% de los hogares venezolanos vive en inseguridad alimentaria por el cierre de establecimientos, la escasez y costos de los alimentos y las dificultades para cocinar por falta de agua, gas y electricidad.
Un 33% de los niños entre 0-2 años de edad de sectores pobres tiene retardo de crecimiento según el indicador talla/edad; exponiéndolos a irremediables trastornos del desarrollo y enfermedades a futuro.
En otro punto destaca que 25.000 embarazadas no reciben control prenatal y 7.500 se controlan tardíamente en el octavo y noveno mes de embarazo, poniendo en riesgo sus vidas y las de sus hijos en un contexto de emergencia alimentaria. En parte, son los puntos más importantes analizados en este reporte.
2018-01-09
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