Una ovación y listo: ¡pechos libnres como el mar! ¿Imposible? Ya no. Existe un sujetador que se desata con el sonido de las palmas. Fue creado por Randy Sárafan, un ‘artista hacker’ según describen en Cnet y este se inspiró en modelos de ropa interior ‘electrónica’ que vio en bazares sirios. En ese caso, los sujetadores llevaban luces, brillaban en la oscuridad o se controlaban con el mando a distancia./que.es
Martes 16/07/2013