Un hombre demandó a la cadena de comida rápida KFC por supuestamente haberse roto un diente al morder una hamburguesa de pollo preparada en uno de sus establecimientos en Australia, informaron hoy medios locales.
Stuart Kopania busca que KFC le pague una indemnización de unos 10.929 dólares (9.954 euros) por el dolor y sufrimiento causado por el incidente, además de los gastos médicos vinculados a la reparación de su muela, según la cadena local ABC.
La demanda presentada en un tribunal de la ciudad australiana de Adelaida explica que el hombre compró en KFC una hamburguesa de pollo deshuesado en julio de 2010 y acusa a esta cadena de comida rápida de negligencia por no asegurarse de que sus alimentos son seguros para el consumo.
KFC argumenta que el dolor y sufrimiento del demandante no está vinculado al caso, en el que las partes pueden lograr un acuerdo extrajudicial antes de la vista prevista para febrero del próximo año, agregó la fuente.
2013-12-10