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Esta joven china de 22 años de edad sufre una enfermedad genética muy rara: la ictiosis, esta condición provoca que la piel se vuelva seca y escamosa, semejante a la de un pez. Los científicos todavía no son capaces de determinar la verdadera causa de esta rara enfermedad.
Para todo el que padece esta enfermedad, cualquier contacto con el mundo exterior resulta doloroso, debido a que su piel es bastante delicada. Cuando los padres biológicos de Mui vieron el aspecto de su hija, no quisieron enfrentarse a la dura vida que les esperaba, por lo que la abandonaron a su destino en el hospital.
Sin embargo, esta inusual bebita pronto se ganó el interés de un joven matrimonio. Tina y Roger Thomas visitaban a la pequeña varias veces a la semana y un buen día decidieron adoptarla.
Con el paso de los años, Mui tuvo que aprender a sobrevivir con su terrible enfermedad en este mundo cruel, hubo momentos difíciles, en varias ocasiones, sus compañeros de escuela se burlaban llamándola "la chica-pez", la desesperación la llevó a intentar suicidarse. Incluso, el director de la escuela firmó un pedido especial donde expresaba que a Mui se le tenía prohibido aparecer en una determinada parte de la escuela, ya que uno de los estudiantes le tenía “miedo a muerte”.
Por suerte, esta valiente muchacha por fin encontró una esfera donde poder realizarse, su sueño es convertirse en árbitro de competiciones internacionales de Rugby. Para alcanzarlo, asiste a un centro para personas con discapacidad en Hong Kong.
01-12-2015