EFE
La historia y las anécdotas en torno a una de las obras más conocidas del escultor Richard Serra, "Arcos crecientes", se muestran en el museo Boijmans van Beuningen de Róterdam (Holanda) mediante una exposición multimedia que revela al público sus aspectos artísticos más ocultos.
La colosal y conocida escultura "Arcos crecientes (Waxing Arcs)" de Serra forma parte de los fondos del museo e, instalada en su entrada, se puede contemplar desde la calle, aunque según los expertos es una de las menos comprendidas por el gran público.
Según los organizadores de la exposición, "pocos visitantes sospecharían sobre la historia y anécdotas que hay detrás de los dos sorprendentes arcos oxidados" que acoge la Galería Serra del Boijmans.
La muestra se expone hasta octubre de 2015 bajo el nombre "En constante movimiento" y consta de una "experiencia multimedia de doce minutos compuesta por fotografías, fragmentos de películas y audio, que hacen que el visitante se transporte a la historia de la obra", explicaron sus organizadores.
Para entender mejor la obra del escultor estadounidense, el espacio de la galería se ha vaciado para que los arcos cobren protagonismo junto al material multimedia.
"La exposición demuestra que la apariencia y el significado de las obras de arte no son fijos, sino que cambian", explicó el comisario de la muestra, Saskia van Kampen-Prein.
Las técnicas multimedia empleadas permiten proyectar todos los cambios en el proceso de trabajo y construcción de la obra. Además, "encajan con el deseo del artista de dejar el espacio alrededor de la obra lo más vacío posible", añadió van Kampen-Prein.
Incluso muestra cómo la obra se fue adaptando a las modificaciones arquitectónicas que el propio museo sufrió a lo largo de los años.
En la actualidad, el espacio actual es dos veces más grande que la galería inicial de 1980 y en ocasiones sirve como exposición para otras obras de arte.
Después de cada una de las actuaciones de doce minutos, la obra de arte se puede apreciar en todo su esplendor en un espacio vacío, haciendo que el visitante conciba el trabajo de Serra (San Francisco, EE.UU.,1939) como él mismo pretende y gracias al conocimiento previo que ofrece de la muestra multimedia.
Serra, mundialmente conocido sobre todo por sus estructuras metálicas minimalistas, creó esta obra en 1980 para ser exhibida en una exposición individual en el Museo Boijmans, que más tarde adquirió y acogió en la sala que lleva su nombre: Galería Serra.
Para el escultor, "no se puede experimentar un espacio fuera de su contexto; la experiencia de la escultura se lleva a cabo íntegramente dentro de los límites del espacio asignado a la misma, en este caso una galería", señaló el museo.
La idea subyacente de Serra para este trabajo fue que el público experimentaría el espacio de manera diferente, ya sea caminando a través o pasando alrededor, en parte debido a cómo están colocados los arcos en el espacio.
Así, la obra refleja la naturaleza de la escultura que interesa al artista: aquella la relacionada con el caminar o la búsqueda de la simultaneidad de momentos secuenciales.
Una de las curiosidades que el propio Serra destacaba de "Arcos crecientes" es que los dos planos son paralelos, pero el espacio en su compresión es en escorzo y termina buscando una elíptica.
El estadounidense ha desarrollado gradualmente esta fascinación por el espacio alrededor de sus esculturas en otras creaciones a gran escala como demostró con el "Arco inclinado" (1981), que estuvo expuesto en la Plaza Federal en Nueva York, y en "La materia del tiempo" (2005), expuesta en el Guggenheim Bilbao.
Otra de las características del artista radica en la apreciación de la calidad intrínseca del material, pues no estaba interesado en embellecer las superficies, recordó el museo.
"El color del material es el color de mi trabajo", manifestó Serra el día de la instalación de "Arcos crecientes" en la institución neerlandesa.
La exposición también incluye en su programación un programa de cine en torno a la obra de Serra, vinculado igualmente al mundo del cine.
2014-10-22