Una campeona olímpica confesó una práctica antihigiénica. Un reportaje del The Wall Street Journal que se titula El sucio secreto de los nadadores olímpicos sacó a la luz una práctica muy particular entre los deportistas y es orinar en la piscina. Este comportamiento lo confirmaron famosos nadadores.
La práctica antihigiénica de los nadadores
La joven nadadora olímpica Lilly King, doble campeona de 100 metros braza y en relevo 4×100 estilos en los Juegos de Río 2016 confesó «Puedo orinar mientras nado, lo cual es casi un don. Definitivamente es una habilidad».
Para intentar comprender tan sorprendente reflexión de la deportista de Indiana hay que tener en cuenta que los nadadores, debido al gran desgaste físico que realizan, necesitan beber mucho líquido para hidratarse. Además, los bañadores, cada vez más ceñidos y aerodinámicos, no facilitan la habitual operación de ir al baño.
Lilly King no es la única que lo confesó, también el nadador Zach Harting, campeón del mundo en 2024 en el relevo 4×100 estilos, reconoció hacer esta práctica desde su participación en competiciones estatales de secundaria: “El mundo cambió para mí después de orinar en la piscina por primera vez.
Después de eso, cada vez que iba a una piscina solo consideraba que había nadado en ella si orinaba”. Harting destaca también la necesidad de constante hidratación: “Siempre tengo que orinar porque bebo mucho para hidratarme”.
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