El seleccionador Luiz Felipe Scolari se mostró complacido con el desempeño de Brasil en el amistoso de este jueves ante Italia, pese a que la "verdeamarela" desperdició una ventaja de dos goles y debió conformarse con un empate por 2-2.
"Hubo más evolución que cualquier otra cosa. Estamos empezando a crear un sistema de juego, este es nuestro segundo partido y, pese a que sufrimos dos goles, me gustó como se portó el equipo", expresó "Felipao", al comentar en una rueda de prensa el encuentro jugado en Ginebra.
Scolari, quien asumió en noviembre el comando de la "verdeamarela", reconoció que la selección brasileña presentó "algunos altibajos", pero opinó que, "en general, el equipo se portó muy bien desde el inicio hasta el final".
El entrenador anticipó asismismo que volverá a utilizar el lunes, en el amistoso con Rusia, en Londres, el sistema con tres atacantes adoptado ante Italia, y que realizará pocas modificaciones en la alineación titular: "Dos o tres, como máximo".
Los jugadores de la selección brasileña, a su vez, se mostraron decepcionados por el empate, pero coincidieron en reconocer una "evolución" en el juego del equipo.
"Cambió principalmente el espíritu, el equipo es más agresivo, marca mejor. Estamos tristes, porque podríamos haber ganado, pero al mismo tiempo nos sentimos aliviados, porque hubo una evolución que traerá cosas buenas en el futuro", dijo el delantero Fred, autor del primer gol brasileño.
El lateral Dani Alves aseguró que, bajo el comando de Scolari, Brasil "mejoró su nivel de competitividad" y jugó hoy "un partido mucho más intenso" que el que se vio en la derrota por 2-1 ante Inglaterra, en febrero, en el amistoso de debut del nuevo seleccionador.
"Estamos mejorando, todavía hay que adaptar algunas cosas. Desafortunadamente hoy no hemos logrado la victoria, pero nos vamos contentos porque hubo una evolución", expresó.
El astro Neymar -muy elogiado hoy por Scolari- afirmó que la reacción de Italia dejó "un gusto amargo".
"Jugamos un bello partido, pero sufrimos el empate, lo que dejó un gusto amargo. Podríamos haberle ganado a Italia. La lección que queda es que tenemos que ajustar algunos detalles", dijo el "muchacho de oro" del Santos.
El seleccionador italiano, Cesare Prandelli, también se fue del estadio de Ginebra contento, pese a que su equipo no logró romper la "maldición" de más de tres décadas: la última victoria de Italia sobre Brasil ocurrió en 1982, durante el Mundial de España.
Según Prandelli, la reacción del segundo tiempo reveló que sus pupilos "se permitieron tener el coraje que debe tener un equipo"./DPA