Los asistentes al diálogo nacional egipcio han acordado crear una comisión para estudiar las enmiendas a la Constitución y han descartado la formación de un gobierno de salvación nacional, las principales demandas de la oposición no islamista, según informó hoy la Presidencia.
En una rueda de prensa, el portavoz de la Presidencia, Yaser Ali, explicó que en la sesión del diálogo de ayer convocada por el jefe de Estado Mohamed Mursi se decidió establecer un comité jurídico y político que se encargará de revisar y clasificar las enmiendas a la Carta Magna, aprobada en referéndum el pasado diciembre.
Dicha comisión estará compuesta por diez miembros, entre ellos cinco catedráticos de derecho y cinco políticos de las principales tendencias, incluidas las fuerzas opositoras que se han ausentado del diálogo y consideran que la redacción de la Constitución estuvo monopolizada por los islamistas.
El Frente de Salvación Nacional (FSN), principal alianza opositora no islamista, condicionó ayer el diálogo con el presidente a que se formen un gobierno de salvación, un comité para modificar la Constitución y otro para investigar las muertes en los últimos disturbios.
En este sentido, Ali subrayó que Mursi se ha comprometido a presentar un informe sobre la situación de seguridad en Egipto en la siguiente reunión del diálogo, prevista para la próxima semana.
En ese encuentro, los asistentes decidirán si se mantiene el estado de emergencia decretado hace dos días por Mursi en las provincias de Port Said, Ismailiya y Suez, si se reduce su periodo y espacio de aplicación o si se anula definitivamente, según el portavoz.
Ali apuntó que la Presidencia no deseaba establecer un toque de queda en estas zonas, pero que se vio obligada a adoptar estas medidas de excepción "para proteger a la patria y a los ciudadanos, y no con el objetivo de impedir las manifestaciones pacíficas".
Durante la reunión del diálogo nacional, se destacó la importancia de diferenciar entre la manifestaciones pacíficas y la violencia, y se instó al Gobierno a preservar la seguridad en todo Egipto y a las fuerzas políticas a condenar los disturbios.
En la rueda de prensa, la consejera presidencial, Pakinam Sharkawy, dijo también que se ha descartado la idea de formar un gobierno de salvación nacional ya que se celebrarán elecciones parlamentarias dentro de dos meses y no hay tiempo para formar un gabinete de estas características.
Los miembros del diálogo han aprobado, además, formar comisiones para tratar asuntos como el diálogo con las fuerzas juveniles, la reconciliación nacional, las garantías electorales, así como las reformas económicas y de derechos sociales.
Además, han renovado la convocatoria a las distintas fuerzas políticas para que se adhieran al dialogo para determinar los detalles de la agenda de los próximos días.
Desde el viernes pasado, varias provincias egipcias han sido escenario de disturbios, que han causado más de cincuenta muertos y centenares de heridos, desencadenados con motivo de la conmemoración el 25 de enero del segundo aniversario del inicio de la revolución que derrocó al régimen del presidente Hosni Mubarak (1981-2011).
A esos disturbios se sumaron los choques en Port Said (noreste), originados el sábado tras conocerse la decisión de un tribunal penal de recomendar la pena de muerte para 21 acusados de participar en la matanza de 74 personas hace casi un año en el estadio de fútbol local. EFE