Australia admitió hoy la responsabilidad compartida en la muerte el jueves pasado dos niños afganos en una operación como parte de una misión de la ISAF en la provincia meridional de Uruzgán.
"La ADF (siglas en inglés de las Fuerzas Armadas de Australia) y la ISAF (la misión de la OTAN en Afganistán) han aceptado su responsabilidad y así se lo han expresado a las autoridades afganas", dijo el ministro australiano de Defensa, Stephen Smith, en una rueda de prensa en la ciudad de Sídney.
Smith recordó que el jefe de las fuerzas armadas australianas, David Hurley, y el jefe de la ISAF, Joseph Dunford, han pedido públicamente disculpas por este terrible y trágico incidente y ambos han ordenado la investigación de los hechos.
Los niños, de siete y ocho años, murieron el jueves por la mañana cuando las fuerzas especiales australianas combatían un aparente ataque talibán en Uruzgán.
"Los niños fueron muertos a manos de los soldados australianos, fue por error, no fue deliberado", dijo recientemente el gobernador provincial de Uruzgán, Amir Mohammad Akhundzada, tras precisar que los insurgentes dispararon primero contra un helicóptero en el que viajaban soldados del país oceánico, según la cadena local ABC.
Smith dijo hoy que el Gobierno no comentará sobre las circunstancias en las que murieron los dos niños afganos hasta que se completen las investigaciones, al insistir que "lo único que sabemos es que ha ocurrido una tragedia".
El ministro australiano aseguró que las familias de las víctimas recibirán "una forma de pago indemnizatorio", aunque no precisó el monto.
Hay varias versiones sobre los hechos, entre ellas que los soldados de Australia, que tiene el mayor contingente militar fuera de la OTAN, dispararon por error contra los niños y que los menores murieron por disparos realizados desde un helicóptero de la ISAF.
La muerte de civiles en acciones armadas aliadas es uno de los puntos de mayor fricción entre la OTAN y el Gobierno de Afganistán, que en febrero ya pidió a su Ejército que no vuelva a solicitar apoyo aéreo de la ISAF en operaciones en zonas habitadas.
Las tropas extranjeras comenzaron en 2011 a retirarse progresivamente del país asiático y a transferir el control de la seguridad a las fuerzas afganas como parte de un proceso que deberá concluir en 2014. EFE