Dos años después de haber sobrevivido a un disparo en la cabeza, la ex congresista estadounidense Gabrielle Giffords lanzó junto a su marido una campaña contra la violencia provocada por las armas en su país, según anunció la pareja en un artículo para el diario "USA Today".
Bajo el nombre "Estadounidenses por soluciones responsables", la campaña tiene como objetivo iniciar un diálogo nacional y recaudar los fondos necesarios para limitar la influencia del lobby armamentístico.
"Las reformas que reduzcan la violencia de las armas y eviten masacres suponen plantar cara a la influencia y los medios del lobby armamentístico", explicaron Giffords y su marido, el astronauta Mark Kelly. Según el matrimonio, lo principal es convencer al Congreso.
Tras la masacre del pasado diciembre en la escuela de Newtown, en la que murieron 26 personas, el presidente estadounidense, Barack Obama, se ha mostrado dispuesto a endurecer las leyes relativas a la tenencia de armas.
Giffords resultó gravemente herida durante un mitin en Tucson, Arizona, en un tiroteo en el que Jare Lee, de 24 años, mató a seis personas. En noviembre pasado Lee fue condenado a cadena perpetua. La congresista demócrata de 42 años, que sobrevivió con graves daños cerebrales, dejó su escaño para poder concentrarse en su recuperación.