El exministro de Defensa ruso, Anatoli Serdiukov, interrogado la víspera por las autoridades del país en calidad de testigo, niega cualquier implicación en el caso de corrupción que salpicó a su cartera, reveló hoy una fuente próxima a la investigación.
El exministro se negó ayer a ofrecer su testimonio en la investigación de una estafa con bienes de Defensa por valor de más de 3.000 millones de rublos (casi 100 millones de dólares), en la que estaría presuntamente implicada la empresa Oboronservice, dependiente de esa cartera.
No obstante, "en declaraciones por escrito, presentadas el pasado viernes a la Dirección militar de Instrucción, Serdiukov pormenoriza con detalle su propia versión del mecanismo para la venta de las propiedades de Defensa y niega al mismo tiempo su responsabilidad", explicó la fuente a la agencia rusa Interfax.
Según las pesquisas, Oboronservice era utilizada para vender patrimonio -inmuebles y otros activos- del Ministerio a precios por debajo de los del mercado.
El exministro insiste en que la responsabilidad de las posibles irregularidades, si tuvieron lugar, recae en todo caso en algunos de los que fueron sus subordinados.
El portavoz del CI, Vladímir Markin, no descarta que el estatus de testigo del exministro podría cambiar "por otro", supuestamente por el de acusado.
"La postura del exministro de Defensa (su negativa a declarar como testigo) podría ser catalogada como un intento de obstaculizar la investigación", dijo Markin.
La prensa rusa, sin embargo, considera a Serdiukov como uno de los "intocables" del entorno del presidente ruso, Vladímir Putin.
Destituido el 6 de noviembre pasado, es el más alto funcionario apartado del poder como consecuencia de un escándalo desde que Putin asumiera la jefatura del Kremlin en el año 2000.EFE