La violencia se recrudeció en Guatemala, con una cifra récord de muertes en enero, informaron hoy fuentes oficiales, con lo que el optimismo de las autoridades por los logros alcanzados en este tema en 2012 quedó en entredicho.
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) informó que en enero se registraron 551 muertes asociadas a causas criminales, 44 más que en el mismo período del año pasado. La cifra también es superior al registro correspondiente de los años 2011 y 2010.
Lo más preocupante para las autoridades es que febrero también se inicia con hechos que presagian que la tendencia se mantendrá igual.
Los cuerpos de cuatro hombres no identificados fueron hallados dentro de una camioneta el viernes en un camino vecinal en el departamento de Izabal. Tenían un balazo en la cabeza y estaban atados los pies y manos, con señales de tortura.
Otras nueve personas murieron baleadas el viernes en todo el país, de acuerdo con informes de los cuerpos de socorro.
Las cifras de enero, de acuerdo con los registros del Inacif, señalan que uno de los departamentos más violentos fue Jutiapa, en oriente, fronterizo con El Salvador, con 28 crímenes, de las cuales ocho corresponden a mujeres, dos de ellas niñas.
El registro en Jutiapa es el más alto en los últimos 10 años. En 2012 la cifra fue de 18 y en 2011, el total fue de 20.
El 14 de enero, al presentar el informe de su primer año de gestión, el presidente Otto Pérez destacó la reducción de los índices de violencia y criminalidad como su principal logro.
El presidente destacó que en 2012 se logró un "descenso histórico" de un diez por ciento en las muertes violentas -526 homicidios menos que en 2011-, lo que representó "la reducción de casi cinco puntos en la tasa de homicidios por cada cien mil habitantes".
La violencia e inseguridad es el tema que más aflige a los guatemaltecos, incluyendo al propio gobierno que se esfuerza por promover al país por sus ventajas estratégicas y beneficios para inversiones que ayudarían a generar empleos.
El ministro de Gobernación (Interior), Mauricio López, reconoció el jueves al ser citado por diputados de la oposición, en el Congreso, que en enero hubo un incremento de homcidios y se justificó al señalar que hay una "limitada presencia" de las fuerzas de seguridad por falta de recursos.
Ese mismo día el funcionario presentó un informe de actividades ante el presidente Pérez y el cuerpo diplomático y expuso que para el año 2013 el desafío es mejorar el trabajo de la Policía Nacional Civil (PNC).
López también informó que el presidente Pérez está evaluando la posibilidad de decretar estados de Excepción en áreas específicas del país para "entrar a desarmar a los delincuentes".
"El tema es que hay una estructura delincuencial que no puede seguir con sus acciones. Hay demasiadas armas en manos de particulares, pandilleros y nacrotraficantes, y mientras se siga así, aumentan los índices delictivos", dijo. / DPA.
