Los recortes en el presupuesto del departamento de Defensa estadounidense tendrán un impacto en los esfuerzos de interdicción e incautación de drogas en América Latina, advirtió este miércoles el jefe del Mando Sur de EE.UU., el general John Kelly.
El general Kelly, responsable de la región militar que cubre América Latina, advirtió en una audiencia en el Congreso de EE.UU., que los recortes pueden significar que el Mando Sur deje de contar con barcos patrulleros para "apoyar las operaciones de interdicción" en la región.
El general señaló que la flota de barcos de la que dispone podría bajar de los cinco o seis con los que suele operar el Mando Sur a uno o ninguno, cuando lo ideal sería tener 14 barcos desplegados en el Caribe y el Pacífico.
El pasado 1 de marzo entraron en vigor una serie de recortes automáticos en el gasto público -de los que le corresponden 46.000 millones al Pentágono- por falta de un acuerdo entre la Casa Blanca y el Congreso para reducir de forma ordenada el déficit presupuestario.
Kelly recordó que el pasado año Estados Unidos se incautó de entre 150 y 200 toneladas de cocaína, con ayuda de países como Honduras, Guatemala, Belice, El Salvador y Colombia, país éste último que mencionó como ejemplo en la lucha antinarcóticos.
Sin embargo, señaló que sin esos recursos será más fácil que la droga llegue a tierra y sea distribuida en Estados Unidos.
"Si las drogas pueden eludir las patrullas en el mar y pueden llegar a tierra en Centroamérica, están prácticamente en Estados Unidos, con poco éxito de que las saquemos del mercado", dijo el general.
Kelly se mostró "profundamente preocupado" por que estos recortes "pongan en peligro nuestra capacidad de mantener esta cooperación exitosa" con los aliados en la región.
En este sentido, advirtió además de que ese incremento en el flujo de drogas "sin obstáculos" contribuirá a la "inestabilidad, corrupción, violencia" en América Central y México, impidiendo "mejorar la seguridad ciudadana".
El general señaló que un aumento en la cantidad de droga en circulación contribuirá a bajar su coste y aumentar la distribución, lo que afectará a los "importantes avances logrados" en Estados Unidos para reducir la demanda.
En Estados Unidos 40.000 personas mueren al año a causa de las drogas, incluido el abuso de prescripciones médicas, que tiene un costo de 200.000 millones de dólares para el país, "gran parte para tratar de rehabilitar a los drogadictos". /EFE