El Gobierno de Nicaragua expresó este viernes su solidaridad al de Rusia por la caída este viernes de un gran meteorito en una zona poblada de la región rusa de los Urales, donde dejó un millar de heridos y causó pánico entre la población.
"Nuestros saludos y solidaridad para el pueblo de la Federación Rusa, esa región rusa en los montes Urales, donde mas de 1.000 personas han requerido hospitalización después de que cayeran fragmentos de un meteorito", dijo a través de medios oficiales la primera dama y portavoz nicaragüense, Rosario Murillo.
Murillo expresó en nombre de su esposo, el gobernante Daniel Ortega, su solidaridad con las familias afectadas, con el presidente ruso, Vladímir Putin, y con las autoridades de ese país.
Aseguró que Ortega siguió por televisión cómo Putin observaba "todos los alcances de la situación de emergencia, la situación humana, de los edificios y viviendas afectadas, y todas las medidas ya se están tomando".
El meteorito cayó este viernes a unos 80 kilómetros de la ciudad de Satka, cabecera del distrito del mismo nombre, sobre las 09.20 hora local rusa (03.20 GMT), pero la onda expansiva afectó a varias regiones adyacentes y hasta a la vecina república centroasiática de Kazajistán.
Científicos rusos instalaron un laboratorio en la zona para estudiar los restos del meteorito bautizado ya como el "Bólido de Cheliábinsk", ya que es en esa región de los Urales donde cayó el cuerpo astral.
Las autoridades rusas cifran en 100.000 metros cuadrados los cristales de las ventanas que saltaron por los aires debido a las explosiones, lo que dejó centenares de viviendas sin protección en pleno invierno. /EFE
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