Rusia apoyará una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU contra Corea del Norte si ésta es equilibrada y no perjudica sus intereses, aseguró hoy Guennadi Gatílov, viceministro de Exteriores ruso.
"Consideramos que la resolución debe ser comedida y equilibrada, e incluir medidas que no perjudiquen los intereses económicos legales de otros países", dijo Gatílov a la agencia Interfax.
El diplomático ruso agregó que "si logramos un entendimiento mutuo al respecto con el autor del proyecto de resolución, EEUU, estaremos dispuestos a aprobar esa decisión del Consejo de Seguridad de la ONU".
"Ahora mantenemos consultas para que nuestros legales intereses económicos y financieros no se vean afectados y que la resolución no repercuta en la actividad normal de las legaciones diplomáticas en Corea del Norte, incluido la embajada rusa", agregó.
El representante de la Cancillería rusa subrayó también que su país "considera importante que el Consejo de Seguridad de la ONU reaccione al lanzamiento en diciembre de un cohete en Corea del Norte".
Gatílov explicó que el proyecto de resolución estadounidense no contempla nuevas sanciones contra el régimen comunista, sino que amplía las restricciones contra funcionarios y compañías estatales norcoreanas.
Pyongyang lanzó el pasado 12 de diciembre un cohete de largo alcance Unha-3, que aparentemente logró poner en órbita por primera vez en su historia un satélite de observación.
No obstante, EEUU y Corea del Sur mantienen que el proyecto espacial encubre un ensayo ilegal de misiles balísticos y que el cohete portador Unha-3 es en realidad un proyectil derivado de su misil de largo alcance Taepodong-2 con capacidad para alcanzar territorio estadounidense.
Por ello, tanto Washington como Seúl quieren que la ONU refuerce las sanciones que ya impone a Corea del Norte por anteriores ensayos nucleares y de misiles.
El lanzamiento de diciembre fue condenado por gran parte de la comunidad internacional, incluido China, el principal aliado del régimen ahora encabezado por Kim Jong-un.
El anterior lanzamiento de un cohete portador Unha-3 en abril pasado finalizó en un fracaso y ya acarreó a Corea del Norte el endurecimiento de las sanciones que le impone la ONU por anteriores ensayos nucleares y de misiles.
Anteriormente, el país comunista realizó otros tres lanzamientos de proyectiles de largo alcance en 1998, 2006 y 2009, todos ellos bajo el mandato de Kim Jong-il, padre del actual líder norcoreano.
Rusia, que comparte con Corea del Norte una frontera terrestre de apenas 20 kilómetros, es uno de los seis participantes en las conversaciones nucleares multipartitas junto a ambas Coreas, China, EEUU y Japón. EFE