Las autoridades de EE.UU. presentaron hoy cargos contra Dino Bouterse, hijo del presidente de Surinam, Desi Bouterse, por intentar ofrecer apoyo material al grupo chií libanés Hezbolá, incluido en la lista de organizaciones terroristas.
Así lo anunció hoy la oficina del fiscal federal del Distrito Sur de Nueva York, Preet Bharara, que ya había presentado en septiembre pasado cargos contra Dino Bouterse por conspiración para importar cocaína en Estados Unidos.
"Hoy presentamos nuevos cargos contra Bouterse por intentar apoyar a Hezbolá en conexión con una conspiración para distribuir cocaína en Estados Unidos", dijo el fiscal en un comunicado al anunciar los nuevos delitos.
Según la fiscalía, el acusado aprovechó su posición en su país al frente de la lucha antiterrorista para ayudar a presuntos miembros de la milicia radical libanesa, incluida en la lista de grupos terroristas del Departamento de Estado.
Los investigadores aseguran que "a cambio de una suma millonaria de dinero", el hijo del presidente de Surinam permitió que miembros de Hezbolá utilizaran su país como base de operaciones desde donde se organizaron ataques contra objetivos estadounidenses.
El hijo del mandatario suranimés fue detenido el pasado mes de agosto en Panamá a petición de las autoridades Estados Unidos por cargos relacionados con tráfico de drogas y armas, y en el momento de su arresto viajaba con pasaporte diplomático.
Bouterse, que fue extraditado a EE.UU. y se declaró no culpable de los primeros cargos que presentó en su contra la fiscalía, había sido condenado en 2005 en su país a ocho años de cárcel por los mismos delitos, aunque fue liberado en 2008 por buen comportamiento.
Se da la circunstancia de que el presidente de Surinam, un exgolpista de 68 años protegido por inmunidad presidencial, también fue juzgado y condenado en ausencia en 1999 a once años de cárcel por tráfico de cocaína en un tribunal de Amsterdam.
También se le declaró culpable de la muerte en 1982 de 15 críticos a su régimen, entre los que había periodistas, sindicalistas, abogados, empresarios y oficiales militares. EFE