DPA
El ex presidente del Perú Alan García, uno de los más duros críticos del gobierno de Ollanta Humala, condicionó hoy un probable diálogo con el nuevo jefe del gabinete, René Cornejo, a que el Ejecutivo retroceda en la decisión de duplicar los salarios de los ministros.
"Si el presidente de Consejo de ministros pide diálogo, que rectifique primero el grosero aumento de (a) 30.000 soles (unos 10.700 dólares) para los ministros y otros privilegiados", escribió García en Twitter.
Anteriormente Cornejo, en sus primeras declaraciones en el cargo, convocó a las fuerzas políticas para tener un diálogo "real y efectivo".
Cornejo comenzó así con una propuesta similar a las planteadas por algunos de sus antecesores, las que no han tenido éxito por las discrepancias entre el gobierno y la oposición más radical, representada sobre todo en el partido derechista Fuerza Popular (FP) y el centroderechista Partido Aprista Peruano, de García.
Hasta ahora la líder de FP, la ex candidata presidencial Keiko Fujimori, no ha hecho comentarios.
García, acusado por sus adversarios de recurrir a planteamientos "demagógicos" para fortalecer una posible candidatura en 2016, se ha hecho eco del gran malestar popular que existe por la decisión de los ministros de autoduplicarse los ingresos a partir de este mes, medida que también alcanza a los viceministros y secretarios de ministerios.
Los críticos del aumento argumentan que así como se aumenta los sueldos a "privilegiados" se piense también en otros trabajadores del Estado que tienen bajos ingresos, como profesores, policías, médicos, enfermeras y militares, y se incremente el salario mínimo, que está en 750 soles (unos 270 dólares), una cuarentava parte del de los ministros.
Ante los reclamos por el aumento, el entonces presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva, dijo que estaba en agenda un alza del salario mínimo, lo que fue desmentido públicamente por la primera dama, Nadine Heredia, y el ministro de economía, Luis Miguel Castilla, todo lo cual puso a la luz las discrepancias internas y terminó con la renuncia el lunes del jefe del gabinete.
Para analistas, el gabinete de Cornejo nace con poca fuerza, por ser él mismo un funcionario acostumbrado al bajo perfil y que, según los críticos, es obsecuente con Heredia, convertida en el principal flanco de ataques contra Humala. Con el llamado al diálogo, Cornejo apunta a buscar posibles consensos en momentos en que el apoyo popular al gobierno va en descenso.