Bolivia endurecerá los controles para el ingreso y residencia de extranjeros en su territorio, según un proyecto de ley sobre migraciones que discute el Parlamento y que será pronto promulgado, informaron hoy fuentes del legislativas.
Según el proyecto, al que accedió hoy Efe, no se permitirá el ingreso al país de extranjeros indocumentados o con antecedentes penales, con sentencias o que sean buscados internacionalmente por delitos como el tráfico de armas y de drogas, la trata y tráfico de personas, genocidio y terrorismo, entre otros.
Tampoco se permitirá ingresar a inmigrantes extranjeros "cuando así lo determine el Órgano Ejecutivo, por razones de orden público y seguridad del Estado Plurinacional de Bolivia".
Además, se restringirá el ingreso a aquellos visitantes que no cuenten "con la solvencia económica para sustentar su estadía en territorio nacional" como turistas.
Sobre este punto, la diputada de la conservadora Convergencia Nacional Erika Claure, que preside la Comisión de Política Internacional de la Cámara Baja, justificó que en todos los países se pide a los visitantes que demuestren su solvencia económica.
Claure dijo a Efe que actualmente en Bolivia basta con que un extranjero tenga "su pasaporte o su carné de identidad y sus maletas, y nadie le preguntaba con cuánto dinero está entrando ni dónde se va a alojar ni qué iba a hacer con ese dinero".
Agregó que la norma se elaboró considerando leyes migratorias de otros países con el objetivo de no ser "ni muy flexibles ni muy dóciles" con los extranjeros, pues hoy Bolivia "deja entrar a todo el mundo" mientras que en otros países el control es fuerte.
El proyecto también establece que Bolivia podrá suspender los beneficios que otorga a aquellos residentes extranjeros cuyos países "dicten normas o reglamentos que dispongan restricciones" a bolivianos que estén en su territorio.
La norma se debate en momentos en que el ministerio de Gobierno instruyó un plan de control y vigilancia a los extranjeros indocumentados, algunos de los cuales, según las autoridades, están vinculados con crímenes violentos registrados en los últimos meses.
En Bolivia actualmente existen sólo 17 puestos de control de migración para alrededor de 7.000 kilómetros de frontera con Brasil, Perú, Argentina, Chile y Paraguay.
La norma también apunta a facilitar el retorno de los emigrantes bolivianos, a los que otorga beneficios como la exención de impuestos para el envío de menaje doméstico, incluidos, ropa, muebles, aparatos, maquinaria o herramientas empleadas en su actividad laboral.
Según el proyecto, los bolivianos que se acojan al beneficio del retorno podrán pedir al ministerio de Educación que les extienda certificados de competencia laboral, previa acreditación de su experiencia, y también se promoverán normas para evitar que los hijos de emigrantes retornados repitan el año escolar.
Estos beneficios se aplicarán a personas que hayan permanecido en el exterior por al menos dos años y que quieran volver a establecerse en Bolivia en forma definitiva. /EFE