El primer ministro británico, el conservador David Cameron, tachó de "pesimistas" a los miembros de su partido que, como el exministro Michael Portillo, piden la salida inmediata del Reino Unido de la Unión Europea (UE).
Por contra, el líder conservador defendió la "lógica, sensible y práctica" estrategia diseñada para redefinir la relación de su país con el bloque comunitario, que incluye la celebración después de 2015 de un referéndum sobre su pertenencia en la Unión.
Cameron efectuó esas declaraciones durante una conferencia sobre inversión celebrada en Londres, cuyo interés, no obstante, giró hacia el asunto de la UE después de que otro histórico "tory" como Portillo, exministro de Defensa, cuestionara la intenciones del Gobierno de coalición entre conservadores y liberales demócratas.
Portillo consideró hoy que los planes del Ejecutivo para modificar la relación entre Bruselas y Londres y la convocatoria de una consulta popular son una "estratagema hipócrita", al tiempo que aseguró que la UE ya no "sirve a los intereses" del Reino Unido.
Sus palabras reflejan el sentir de un sector importante "tory", inquieto sobre todo por el avance electoral del antieuropeísta y antinmigración Partido Independencia del Reino Unido (UKIP) en los recientes comicios locales en Inglaterra.
Cameron reiteró hoy que todavía es "posible" reformar la UE y el papel que su país desempeña en el bloque, a pesar de que, dijo, su misión en ambos sentidos se está viendo frenada por "dos grupos de pesimistas".
Por un lado, explicó el "premier", están los "pesimistas pro europeos" que dicen que, "para estar en Europa, debes aceptar todas y cada una de las propuestas que cualquiera plantea, que tienes que firmar todos los tratados, que no hay alternativa. Creo que están completamente equivocados".
Luego, prosiguió Cameron, están los "pesimistas" que sostienen que "no se puede reformar la UE, que, simplemente, hay que salir. Creo que también están equivocados".
El primer ministro insistió en que se puede "modificar y reformar esta organización" y, al mismo tiempo, "cambiar la relación" que mantiene con el Reino Unido, al tiempo que se atribuyó el logro de haber abierto el debate sobre "la necesidad de cambio" en la UE.
En su opinión, el bloque no es "suficientemente competitivo, abierto o flexible" y, en consecuencia, "no compite eficazmente con otras partes del mundo que crecen rápidamente".
"A eso hay añadirle que en Europa existe una moneda única que está generando enormes cambios y que obliga a los participantes de la moneda única a entregar grandes cantidades de su soberanía", recordó Cameron.
En ese sentido, el "premier" instó a la UE a que demuestre "flexibilidad" para "incluir en su seno" a países como el Reino Unido, "que no está dentro de la moneda única y que no adoptará la moneda única".
Esa es una "posición optimista, en vez de pesimista", dijo Cameron, quien recalcó que a su país "le interesa continuar conectado con todo el mundo". EFE
Jueves 9/5/2013