2001.com.ve | EFE
La canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa, lamentó la exclusión del presidente, Nicolás Maduro, de la Cumbre de las Américas, pero insistió en que el encuentro "no es sobre Venezuela" sino que se enfocará en el combate a la corrupción.
La VIII edición de la Cumbre, que se celebrará en Lima el 13 y 14 de abril, albergará a la mayoría de los países de la Organización de Estados Americanos (OEA), aunque Venezuela ha sido excluida del evento, motivando la no participación de Antigua y Barbuda.
La posición de Ecuador tras conocerse hace unos meses la retirada de la invitación a Maduro fue la de apoyar su participación al considerar a Venezuela como actor fundamental de la región.
"Así lo ha dicho el presidente Lenín Moreno, es bueno que todos formemos parte de una cumbre para los presidentes del hemisferio", reafirmó hoy la ministra en declaraciones a Efe, en vísperas de que se inicie en Lima la cita.
Espinosa refirió, además, que "habría sido realmente muy provechoso poder tener la presencia de la mayor cantidad de jefes de Estado para tratar un tema con la presencia del país del que se va a discutir", en alusión al país petrolero.
"Lo que es importante señalar es que esta cumbre no es sobre Venezuela. Esta cumbre representa a todos los estados miembros de la OEA y que está enfocada en la lucha contra la corrupción", subrayó.
La jefa de la diplomacia ecuatoriana consideró que la corrupción "es un flagelo supranacional", que "no se circunscribe a ningún país en particular" y apuntó que "lo importante es la capacidad de respuesta de los países para combatirla".
Según el más reciente Índice de Percepción de la Corrupción 2017 difundido en febrero pasado, en el continente americano únicamente once países tienen más de 50 puntos de acuerdo a una tabla en la que se puntúa a los países siendo el valor 0 muy corrupto y 100 muy transparente.
El tema principal de análisis de los países participantes se produce en momentos en los que una decena de estados latinoamericanos se han visto salpicados por el escándalo de corrupción de mayor magnitud de la última década, el del pago de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, que no ha dejado intacto a Ecuador.
El exvicepresidente Jorge Glas, está en prisión desde hace más de medio año en relación a ese caso por el que ha sido condenado, en primera instancia, a seis años de cárcel por el delito de asociación ilícita, una sentencia que está en proceso de apelación.
Sobre la lucha contra la corrupción en el país andino, Espinosa manifestó que "en el caso del Ecuador, hemos dado ejemplo de cómo se combate la corrupción y cómo se anima un proceso de cero impunidad".
Y enumeró una serie de medidas adoptadas por el presidente, Lenín Moreno, de quien dijo "ha cumplido su palabra" al respecto con la "creación del frente por la transparencia y contra la corrupción" o "incluso la consulta popular, el pacto ético, la firma de los compromisos del equipo de su gabinete", entre otras.
Pese a que Ecuador solo obtiene 32 puntos en el índice mencionado y es el octavo país más corrupto del continente según las percepción de sus habitantes, Espinosa opinó que "no es un país particularmente afectado".
"Yo creo que todos los países tienen esos problemas y la cumbre va a permitir que nos juntemos para buscar soluciones comunes", señaló.
Por último avanzó que Moreno presentará en la reunión "algunas alternativas e ideas" con especial énfasis en al gobernabilidad para luchar contra la corrupción y consideró la colaboración en materia de justicia entre los estados y dentro de los mismos, una herramienta imprescindible para combatir el fenómeno.
"La cooperación judicial es fundamental para la lucha contra la corrupción, nosotros estamos convencidos de eso", recalcó.
2018-04-10