EFE
La ciudad marroquí de Casablanca ha dado el primer paso para postularse a la lista de ciudades Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, que cuenta ya con la presencia de nueve sitios marroquíes, entre ellos las ciudades de Marrakech, Fez y Rabat.
Las autoridades marroquíes han inscrito a Casablanca en la llamada "lista indicativa", paso obligatorio antes de que la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) considere si la ciudad candidata reúne los requisitos necesarios para su inscripción, informe hoy el diario Le Matin.
La "lista indicativa" es una especie de inventario donde se enumeran los bienes que cada Estado considera más valiosos: nombre, ubicación geográfica, descripción, justificación de su valor universal excepcional y declaración de autenticidad o integridad.
Las autoridades marroquíes han definido su ciudad como "un laboratorio arquitectónico a cielo abierto, con un patrimonio extremadamente rico y diverso".
A diferencia de otras ciudades de Marruecos, donde priman las realizaciones arquitectónicas medievales, Casablanca es una de las ciudades más "nuevas" en su conjunto, y los principales atractivos arquitectónicos están en la ciudad nueva levantada por los colonizadores franceses con abundancia de edificios modernistas y "art déco".
A estos edificios les acompañan además otras realizaciones en estilo neomorisco o neomudéjar levantadas en el siglo XX, así como uno de los monumentos más emblemáticos de Marruecos, como es la Gran Mezquita de Hasán II, inaugurada en 1993 y que tiene la particularidad de estar construida en su mitad sobre el mismo Océano Atlántico.
Marruecos tiene ahora un año para ir recopilando diferente material antes de presentar oficialmente su demanda de inscripción, según recuerda el diario.
Actualmente son patrimonio mundial de la Humanidad la ciudad de Rabat y las medinas de Fez, Marrakech, Meknés, Esauira y Tetuán, además de las ruinas romanas de Volubilis, la alcazaba en adobe de Ait Ben Hadu y la ciudadela portuguesa de Mazagan (El Yadida). EFE