Centenares de dignatarios y personalidades públicas presentan hoy sus respetos a Nelson Mandela, cuyos restos mortales yacen bajo un arco instalado en el jardín de acceso a la sede gubernamental de Pretoria.
El ataúd, cubierto con tela blanca, está custodiado por cuatro militares uniformados y tres coronas gigantescas de rosas de ese mismo color, según las imágenes facilitadas por la televisión pública al centro de prensa instalado en el exterior del recinto, ya que se ha prohibido el acceso de los medios a la capilla ardiente.
El patio del Unions Buildings, como se conoce a la sede del Ejecutivo sudafricano, se ha convertido en un desfile de jefes de Estado, mandatarios y personalidades cercanas a Madiba.
El último presidente del "apartheid", Frederik de Klerk; el de Zimbabue, Robert Mugabe, y el de Sudán, Omar Hassan Al Bashir, han sido algunos de los líderes internacionales que han estado presentes en el primer día de velatorio.
Tampoco quisieron perderse la oportunidad de despedirse de Mandela artistas como el cantante de U2, Bono, quien no puedo evitar derramar unas lágrimas al pasar junto al ataúd.
Una larga cola copa las escalinatas del edificio gubernamental, al que próximamente accederá el público.
El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, acompañado de Graça Machel, la viuda de Mandela, y de su segunda esposa, Winnie, precedieron al desfile de autoridades a las 11.00 hora local (09.00 GMT).
El público podrá visitar la capilla ardiente hasta las 17.00 horas locales (15.00 GMT), cuando el féretro regresará al Hospital Militar, en un recorrido que se repetirá mañana y el viernes. EFE