EFE
Tras las elecciones primarias del martes, Hillary Clinton se halla más cerca de lograr la candidatura demócrata a la Presidencia de EE.UU. para medirse al virtual nominado republicano, Donald Trump, de cara a los comicios de noviembre.
Sin embargo, la senda de Clinton hacia la nominación presidencial se está presentando más empinada de lo previsto en la pugna que libra con su rival, el senador por Vermont autoproclamado "socialista democrático" Bernie Sanders.
La ex secretaria de Estado, que se postula como continuadora de las políticas del presidente Barack Obama, cedió en la noche del martes ante Sanders en las primarias de Oregón, donde el senador partía como favorito en un estado de población mayoritariamente blanca, un segmento del electorado muy proclive al legislador.
Por el contrario, Clinton, popular entre las minorías como los hispanos y los afroamericanos, batió a su adversario por muy estrecho margen en Kentucky, estado en el que las autoridades electorales la declararon vencedora "no oficial".
Como publicó hoy el diario especializado Politico, el triunfo de la ex primera dama sabe a "consuelo temporal" habida cuenta de que se trata de su única victoria en mayo, pues Sanders ha ganado tres de las últimas cuatro votaciones primarias demócratas.
"¡Hemos ganado Kentucky! Gracias a todos los que participaron. Unidos somos más fuertes", afirmó Clinton en su cuenta oficial de la red social Twitter, en alusión a las grietas que se han abierto en el Partido Demócrata durante el reñido proceso de primarias.
De cualquier manera, las votaciones del martes no cambian el panorama en cuanto al cómputo de delegados que deben designar al nominado demócrata a la Casa Blanca en la convención que el partido celebrará en julio próximo en Filadelfia.
Clinton cuenta con 2.291 delegados y necesita conseguir una mayoría de 2.383 para adjudicarse la candidatura, mientras que Sanders se encuentra muy a la zaga, con 1.528 delegados.
Salvo una catástrofe impensable a día de hoy, todo apunta a que la ex secretaria de Estado superará el umbral de los 2.383 delegados en el "supermartes" electoral del 7 de junio, cuando votarán seis estados.
Todas las miradas se centrarán ese día en California, el estado con más delegados en liza (548) y donde las encuestas, de momento, favorecen a Clinton.
Desde California, Sanders arengó este martes a sus seguidores y, lejos de admitir que sus opciones de alcanzar los 2.383 delegados es misión casi imposible desde un punto de vista matemático, prometió luchar hasta el final.
"Hay mucha gente ahí fuera, muchos expertos y políticos, que dicen que Bernie Sanders debería retirarse. Bien, déjenme ser muy claro: estamos aquí hasta que se emita el último voto", subrayó el senador en un mitin electoral.
2016-05-18