El Partido Comunista formalizó el lunes su apoyo a la candidatura presidencial de Michelle Bachelet en medio de fuertes críticas del oficialismo y de líderes de centroizquierda que en el pasado apoyaron a la ex mandataria.
El presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, dijo el lunes tras un encuentro con Bachelet que se incorporarán a trabajar de inmediato en la campaña de la ex mandataria y que analizarán la posibilidad de sumarse al comando de la candidata.
Dijo que no abordó con la candidata el tema legislativo, pero que Bachelet prometió apoyar a los candidatos comunistas cuando visite las zonas por las que postulan.
El columnista Max Colodro dijo que "en la medida en que Bachelet hoy ofrece un programa de cambios más radicales, se ha producido una mayor convergencia con el PC (Partido Comunista)".
Bachelet encabeza el pacto electoral Nueva Mayoría con el que busca triunfar en las primarias del 30 de junio en las que competirá con el radical José Antonio Gómez, el demócrata cristiano Claudio Orrego, el independiente Andrés Velasco y otros aspirantes menores.
Tanto Orrego como Velasco se apresuraron a señalar que ellos nunca gobernarían con los comunistas.
Los precandidatos oficialistas también criticaron el acercamiento de Bachelet y los comunistas. Pablo Longueira, de la conservadora Unión Demócrata Independiente, dijo que un gobierno de la ex mandataria con el Partido Comunista "sería un retroceso para el país", mientras Andrés Allamand, del centrista Renovación Nacional, señaló que la antigua coalición se ha "izquierdizado".
Carlos Larraín, presidente de Renovación Nacional, dijo que aspira a capturar muchos votos de centro que emigren del pacto electoral de Bachelet por su acercamiento a los comunistas.
El respaldo comunista a Bachelet antes de la elección presidencial es inédito. Durante más de dos décadas el Partido Comunista ha estado en la oposición y en los comicios presidenciales apoyó al candidato de centroizquierda en segunda vuelta, momento en que sus votos fueron vitales ante la estrechez de algunos resultados como el registrado en 1999, cuando el socialista Ricardo Lagos se impuso sobre el conservador Joaquín Lavín por menos de tres puntos.
Los comunistas aspiran también a que Bachelet y los partidos que la respaldan les cedan cupos en al menos otras siete diputaciones y tres senadurías, según ha dicho recientemente Teillier.
Los comunistas obtienen cerca de un 5% de los sufragios en las distintas elecciones chilenas. /AP