“El imperativo moral es vencer la pobreza”, expresó este martes el presidente de Ecuador, Rafael Correa, durante la apertura de la XII Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), que se lleva a cabo en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil.
“No hay mayor atentado a los derechos humanos en el siglo XXI que tener gente viviendo en la miseria, no hay mayor esclavitud, son los esclavos del siglo XXI”, dijo el mandatario.
Durante su discurso inaugural, Correa señaló que para superar la pobreza “necesitamos de nuestros recursos naturales no renovables”.
Explicó que “nuestra gran oportunidad para poder desarrollarnos con soberanía es con nuestros recursos naturales no renovables, con ellos podremos evitar los niveles de explotación, a su fuerza laboral”.
Alerta ante falso discurso progresista
Correa rechazó el falso discurso de grupos presuntamente de ultraizquierda, ambientalistas y de organizaciones no gubernamentales que se oponen al uso razonable de los recursos naturales.
“Todos los problemas que estas posiciones fundamentalistas, extremistas, causan al interior de nuestros procesos, son la nueva oposición, están confundidos, no se dan cuenta que el gran enemigo es el capital y ponen como enemigos a nuestros gobiernos”, expresó.
Instó a los presidentes del Alba a “orientar a nuestros pueblos (…) y que no sean confundidos por la falsa izquierda que es absolutamente funcional a la derecha y el status quo”.
Indicó que para estos grupos “querer aprovechar los recursos naturales para sacar a nuestra gente de la miseria, es ser retardatorio, ser extrativista”.
Señaló que estos grupos acusan a los gobiernos de la región de atentar contra los pueblos indígenas. “Nos dicen en nombre de qué hay que defender los derechos colectivos, el modo de vida de nuestros pueblos indígenas, como si todo estuviera bien, como si nuestros pueblos indígenas vivieran bien”.
Indicó que “nuestros pueblos indígenas no viven bien y se comete el gravísimo error de confundir miseria con folclore, pobreza con cultura”.
Enfatizó que “creer que esa cultura es casa sin piso, con piso de tierra en el siglo XXI, sin electricidad, sin agua potable, sin instalaciones sanitarias, donde los chicos se les meten las lombrices por los pies y tienen el vientre hinchado de bichos, eso está totalmente confundido, eso no es cultura, no es tradición, no es folclore, eso es miseria”.
Por ello reiteró que “en el siglo XXI, en nuestra nueva América no podemos tolerar la miseria”.
El Mandatario explicó que “en nombre de supuestos derechos colectivos, en nombre de supuesto ecologismo, pretender inmovilizarnos. Inmovilizar a nuestros pueblos indígenas en sus condiciones de vida actual, es simplemente criminal”.
Correa dijo que el desafío para “nuestros pueblos ancestrales y para la patria entera, para nuestra América, es cambiar para superar la pobreza, pero sin perder nuestra identidad”.
Precisó que la clave para el desarrollo es la cultura de la innovación, “cuestionarnos día a día, cada día revolucionar la revolución, pensar como podemos hacer las cosas de mejor manera”.