EFE
La Corte de Apelaciones de Santiago rebajó las penas a tres de cinco agentes de la dictadura de Augusto Pinochet, condenados por el secuestro calificado (desaparición) de los hermanos Mario y Nilda Peña Solari a fines de 1974, informaron hoy fuentes judiciales.
La resolución, de las juezas Dobra Lusic, Adelita Ravanales y María Teresa Figueroa modificó la sentencia de primera instancia, dictada el 30 de marzo de 2012 por el juez especial Joaquín Billard a los autores de los secuestros, ocurridos el 9 y 10 de diciembre de 1974 en la capital chilena.
Al general retirado Raúl Iturriaga Neumann, condenado a diez años y un día de prisión por el juez Billard, la corte le rebajó la pena a seis años; mientras al exdetective de la Policía de Investigaciones Risiere Altez España se la recortó de diez años y un día a cinco años y un día.
La corte mantuvo la sentencia de seis años al coronel retirado Manuel Carevic Cubillos y rebajó desde seis a cinco años y un día la sentencia del exdetective Hugo Hernández Valle, en tanto que al también expolicía Manuel Rivas Díaz le mantuvo la pena de tres años de cárcel que el juez Billard había dictaminado en primera instancia.
También mantuvo para Rivas Díaz el beneficio de remisión condicional de la pena, como había resuelto el juez.
El general Iturriaga también cumple una condena de prisión por su participación en el asesinato del general Carlos Prats, antecesor de Pinochet en el mando del Ejercito y asesinado en Buenos Aires en 1974 por agentes de la DINA.
En la parte civil, la corte revocó una indemnización de 30 millones de pesos (unos 60.000 dólares), que el juez había determinado a favor de las familias de las víctimas.
Mario Peña Solari, miembro del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), fue detenido por agentes de la DINA, la policía secreta de Pinochet, el 9 de diciembre de 1974 y al día siguiente, fue allanado su domicilio y arrestada su hermana Nilda, quien estaba embarazada en el momento.
Prisioneros supervivientes dijeron haber visto a los hermanos Peña Solari en centros de tortura de la DINA, el último de ellos conocido como la "Vendsa Sexy" debido a los vejámenes sexuales a que eran sometidas las presas mientras los torturadores hacían sonar a todo volumen música bailable para que los gritos de las víctimas no se escucharan.
Los nombres de los hermanos Peña Solari fueron incluidos en 1975 en la llamada "Operación Colombo", que consistió en un montaje para encubrir la desaparición de 119 presos políticos, en su mayoría militantes del MIR, con la historia, difundida en periódicos apócrifos publicados en Argentina y Brasil, de que habían muerto en purgas internas del grupo rebelde.
Durante la dictadura de Pinochet, según documentos oficiales, unos 2.300 chilenos murieron a manos de agentes del Estado y de ellos, unos 1.192 permanecen aún como desaparecidos.