La Corte Suprema de Justicia argentina declaró la inconstitucionalidad de la modificación del Consejo de la Magistratura y el voto popular de sus miembros, que formaba parte de la reforma judicial impulsada por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y aprobada por el Congreso.
El máximo tribunal resolvió por seis votos a favor y uno en disidencia que la nueva composición del Consejo y la modificación del quórum necesario para designar y destituir magistrados son "inaplicables" y mantuvo la vigencia del régimen anterior.
El fallo dejó asimismo "sin efecto la convocatoria a elecciones para los cargos de consejeros de la Magistratura representantes de los jueces de todas las instancias, de los abogados de la matrícula federal y de otras personas del ámbito académico y científico".
Esta votación popular se iba a llevar a cabo de forma simultánea con las elecciones legislativas del próximo 27 de octubre, por lo que la Corte Suprema subrayó que lo resuelto "no implica afectación alguna del proceso electoral para los cargos de diputados y senadores nacionales".
"Es inválido obligar a los jueces, abogados y académicos a someterse a elecciones populares", sostuvo el máximo tribunal en su fallo.
En una resolución de 67 páginas, la Corte convalidó lo sentenciado por la jueza María Servini de Cubría y declaró inconstitucionales los artículos 2, 4, 18 y 30 de la ley 26.855.
En estos artículos, la reforma judicial kirchnerista establecía la ampliación de 13 a 19 del número de integrantes del Consejo de la Magistratura, de los cuales 12 debían ser elegidos por voto popular mientras que antes jueces, abogados y académicos eran elegidos por sus respectivas entidades.
Por otra parte, modificaba la mayoría de votos necesaria para designar y destituir jueces, que pasaba de los originales dos tercios a la mayoría simple, la mitad más uno de los miembros.
Fernández de Kirchner hizo una fuerte defensa de esta reforma judicial, ante los fallos de primera instancia sobre su inconstitucionalidad que habían suspendido la elección de los consejeros de la Magistratura.
"Nunca nuestro Parlamento tuvo que votar leyes que restrinjan derechos de la gente, al contrario. ¿El Poder Judicial tiene que ser un contrapoder de qué, del pueblo? Porque en definitiva estoy representando a los argentinos", cuestionó la presidenta.
La jefa de Estado preguntó en ese sentido: "¿Quién tiene más poder, el presidente, el Parlamento o un juez, que paraliza una ley con dos líneas y una cautelar?"./DPA
Martes 17/06/2013