El Gobierno de Ecuador expresó hoy su malestar con el de Estados Unidos por no extender los visados a un grupo de demandantes en un juicio ambiental contra la petrolera Chevron, que pretendían presentar sus testimonios en la sede de Naciones Unidas, en Nueva York.
"El Gobierno ecuatoriano expresa su molestia (…) por la falta de trámite de las visas a cinco ciudadanos con pasaporte especial" otorgado por la Cancillería ecuatoriana, señaló esa cartera en un comunicado.
Añadió que los ecuatorianos, afectados por los daños ambientales imputados a Chevron en la Amazonía, pretendían "acudir a la sede de Naciones Unidas para presentar su testimonio durante un evento especial que se realizará en Nueva York, en el marco de la Asamblea General de la ONU".
"Sin ninguna respuesta, la Embajada de Estados Unidos en Quito, devolvió los pasaportes especiales" al grupo de ciudadanos, "quienes debían asistir a un evento oficial en Naciones Unidas, por lo tanto están protegidos por las normas del ‘Convenio de Sede’ de la ONU", añadió la Cancillería.
Por ello, añadió, el Gobierno de Quito, "respetuoso del derecho internacional, exige que todo país se comporte con la misma ecuanimidad y respeto a las normas vigentes y a la costumbre internacional, tal como lo hace Ecuador".
Además, asegura que la petrolera Texaco, adquirida por Chevron en 2001, contaminó dos millones de hectáreas de la Amazonía ecuatoriana, según se desprende del juicio que miles de indígenas y colonos de esa región siguen desde hace más de 13 años contra la petrolera estadounidense.
Una corte de la provincia amazónica de Sucumbíos, en el noreste de Ecuador, condenó en 2011 a Chevron a pagar más de 19.000 millones de dólares como indemnización por los daños ambientales imputados.
La petrolera, que se niega a cumplir la sentencia, considera que es víctima de un fraude en el juicio en Sucumbíos y ha acusado al Gobierno de Quito de haber interferido en el proceso, extremo que las autoridades ecuatorianas lo niegan. /EFE