El Gobierno de Barack Obama urgió hoy a los estadounidenses que viven en Egipto a salir de ese país debido a la "inestabilidad política y social permanente", y les instó "encarecidamente" a evitar cualquier tipo de manifestación.
El Departamento de Estado de EE.UU. emitió una nueva alerta de viaje a Egipto, que sustituye a la del pasado 28 de junio, poco después del derrocamiento del presidente Mohamed Mursi por parte de las Fuerzas Armadas egipcias.
La alerta insta a los estadounidenses que tenían previsto visitar Egipto a que aplacen sus viajes.
El aeropuerto de El Cairo "está abierto y los vuelos comerciales siguen funcionando, aunque se pueden producir cancelaciones", según el Departamento de Estado, que afirma que por ahora "no hay planes" de vuelos chárter u otras evacuaciones patrocinadas por el Gobierno estadounidense.
El Departamento de Estado recuerda que el 28 de junio un joven estadounidense fue asesinado durante una manifestación en Alejandría y que el 9 de mayo otro ciudadano fue atacado con un cuchillo fuera de la embajada de EE.UU. en El Cairo.
Las manifestaciones, incluso las pacíficas, "pueden convertirse rápidamente en violentas y un extranjero podría convertirse en blanco de acoso o algo peor", afirma la alerta.
El presidente de EE.UU. permanece reunido en la Casa Blanca analizando la crisis en Egipto con sus asesores y con los jefes del Pentágono, Chuck Hagel, y de la CIA, John Brennan, según informó hoy la cadena CNN.
Obama aún no se ha pronunciado sobre el derrocamiento deMursi, con quien habló el lunes por teléfono.
Mientras, el Gobierno estadounidense ordenó hoy al personal no esencial de su embajada en El Cairo y a sus familias que abandonen Egipto. /EFE