El Ejéricto iraquí mató a 40 insurgentes del grupo Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), vinculado a Al Qaeda, en una ofensiva por tierra y aire en la volátil ciudad de Faluya, informó un portavoz militar.
Además, se destruyeron 15 vehículos cargados con armas, dijo el general Mohamed al Askari en un comunicado sin dar datos sobre bajas entre las tropas del gobierno.
En diciembre, el Ejército iraquí lanzó una operación en la occidental provincia de Al Anbar después de que 16 soldados, incluyendo un comandante de alto rango, murieran en un ataque de extremistas.
Días después las tensiones aumentaron después de que las tropas leales al gobierno chiita desalojaran un campamento de protesta sunita en Ramadi, la capital de la misma provincia, de mayoría sunita.
Milicianos del ISIS aprovecharon las tensiones para ganar terreno y se hicieron con el control de Faluya y una gran parte de Ramadi y desde entonces el Ejército realiza allí ataques para expulsar a los insurgentes.
Al menos 46.000 familias se han visto obligadas a abandonar Al Anbar desde finales de diciembre debido a los combates, informó el jueves la Media Luna Roja. La violencia en la provincia ha hecho aumentar los temores al regreso a un enfrentamiento sectario como el que puso a Irak al borde de la guerra civil en 2006 y 2007.
El año pasado fue el más sangriento en Irak en el último lustro, con 8.868 muertes por violencia, según cifras de la ONU./ DPA