Agencia EFE
El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, confió en que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dicte medidas cautelares que le permitan recuperar su cargo e hizo un llamado a la movilización ciudadana para contrarrestar lo que llamó "un golpe de estado" que atenta contra el proceso de paz.
El procurador general de Colombia, Alejandro Ordóñez, destituyó e inhabilitó hoy por quince años a Petro para ejercer cargos públicos por su supuesta mala gestión en una crisis de basuras, al determinar que asignó "la prestación del servicio de aseo a dos entidades sin ninguna experiencia, conocimiento y capacidad".
En una entrevista con Efe, el alcalde remarcó que su destitución lleva un mensaje escondido al Gobierno y las FARC, que negocian la paz en La Habana, y también a la juventud colombiana, a los que se les está advirtiendo de que "no es posible cambiar Colombia por la vía pacífica".
Lunes 9/12/2013