El alcalde de Londres, Boris Johnson, equiparó el actual conflicto diplomático entre Londres y Madrid con lo vivido en el Peñón durante la época de Francisco Franco, en un artículo publicado hoy en el "Daily Telegraph".
"Las autoridades españolas han decidido, no por un buen motivo, revivir los controles fronterizos y el acoso general de la época de Franco", apuntó Johnson, para quien España debería "soltar la garganta de nuestra colonia".
Johnson se pronunció sobre las tensiones que enfrentan desde hace dos semanas al Reino Unido y España por la situación en la frontera con el Peñón, donde se han formado largas colas por los controles que España impone a los vehículos que entran y salen de Gibraltar.
Esos controles, que han generado retrasos de horas, se han llevado a cabo después del vertido de 70 bloques de hormigón en aguas que rodean la colonia británica por parte de las autoridades gibraltareñas.
El alcalde de Londres consideró que España está empleando el Peñón para "desviar la atención" de sus problemas económicos.
Sus declaraciones coinciden con el envío hoy de parte de una flota de la Fuerza Naval británica al Mediterráneo, que incluye una visita de un buque de guerra del Reino Unido la próxima semana a Gibraltar como parte de un despliegue militar rutinario y anual.
Con los controles impuestos por España, las autoridades de ese país "están ocasionando retrasos y fastidio y ahora amenazan con imponer una tasa a los vehículos que van al Peñón", dijo el político "tory".
"Eso es ilegal bajo la legislación de la Unión Europea" y "deben pararlo y pronto", agregó el alcalde, quien opinó que el Reino Unido debería proteger el Peñón con la misma determinación que muestra cuando se trata de las Malvinas.
Sobre ese otro asunto, Johnson señaló que es "vital" que el deseo de los gibraltareños es ser británicos al igual que lo hace con los habitantes de las islas Malvinas, cuya soberanía reclama Argentina.
"Ese deseo de ser británico existirá en Gibraltar durante el resto de nuestras vidas y más allá", afirmó. EFE