El maquinista del tren que descarriló el pasado miércoles en Santiago de Compostela, con 78 muertos, pasará hoy a disposición del juez acusado de homicidio por imprudencia.
Francisco José Garzón, que se negó a declarar ante la Policía en el hospital en el que estuvo internado, fue trasladado ayer por la mañana a una comisaría de Santiago (noroeste), donde también se acogió a su derecho legal a ser interrogado por los agentes.
La Policía le detuvo oficialmente el jueves por la tarde, con la imputación de homicidio por prudencia.
A media tarde de hoy se cumplirán las 72 horas en las que un detenido puede estar en manos de la Policía y antes de ser puesto a disposición de un juez que, tras hablar con él, decidirá qué cargos y medidas le aplica.
Los 78 fallecidos en el accidente fueron ya identificados, mientras que el diversos hospitales de la región de Galicia siguen ingresados 71 heridos, 31 de ellos en situación crítica.
Los operarios retiraron de la vía durante la pasada madrugada la locomotora del tren siniestrado, que era la única pieza que quedaba en la vía de ese accidente.
Todas las piezas del tren están bajo custodia de la Policía en una nave de una localidad gallega y puede ser objeto de análisis por los peritos para conocer la dinámica del descarrilamiento. /EFE
Domingo, 28/07/2013