Redacción 2001.com.ve
De los casi 1.000 migrantes cubanos que tienen como destino Estados Unidos y que se encuentran varados la frontera de Panamá con Costa Rica, las autoridades reportaron la muerte de uno de ellos por causas de la gripe AH1N1 y se declararon en alerta para "prevenir y contener cualquier posible brote epidemiológico".
Rubén Ramírez Caso, proveniente de Cuba, falleció a sus 53 años en pasado lunes en el Hospital Rafael Hernández ubicado en la frontera panameña, la causa de su muerte fue confirmada por el Ministerio panameño de Salud.
A través del comunicado también se conoció que el emigrante llegó a panamá a través de la frontera con Colombia, "luego pasó por la de Darién hasta ubicarse en Progreso, Chiriquí".
Como medida preventiva las autoridades sanitarias emprendieron "una serie de acciones, entre ellas una jornada de vacunación, control vectorial y se han ampliado las asistencias médicas para al rededor de 1.000 cubanos migrantes que buscan camino hacia el norte del continente", se manifestó en el documento, asimismo se fortaleció la búsqueda de casos sospechosos, llevando la alerta a todas las intalaciones de salud.
El presidente de la Cruz Roja de Barú, Luis Antonio Rodríguez, afirmó a la agencia EFE que Ramírez venía con problemas de defensas y de edad desde su país.
Los isleños que lo conocían aseguraron que el cubano tenía dos días de haber sido trasladado de Paso Canoas al refugio en Progreso, donde se pudo haber agravado su condición de salud a causa de una gripe.
Convocaron a los medios de comunicación para informar al Gobierno de Panamá y al resto del mundo la incertidumbre en que están.
2016-01-05