Este viernes, el presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo que defenderá “personalmente” al Gobierno de la presidente brasileña, Dilma Rousseff, ante las presuntas amenazas de un golpe de Estado en su contra.
"Hermanos comandantes, oficiales de las Fuerzas Armadas de Brasil, díganle a mi nombre a su comandante (que) no vamos a permitir golpes de Estado en Brasil, ni en Suramérica, ni en América Latina y personalmente nuestro proceso va a defender a la presidenta de Brasil", expresó el mandatario.
También expresó que defenderá al gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y a sus integrantes, los cuales “hicieron mucha historia”.
La crisis económica y los escándalos de corrupción en la empresa petrolera estatal Petrobras han herido la imagen de la mandataria y han espoleado masivas protestas, como las que el pasado domingo llevaron a las calles del país a cerca de un millón de personas que exigieron la destitución de la mandataria.
Los sectores sociales brasileños leales a Rousseff y gobiernos afines de otros países ven que detrás de esas protestas hay afanes de derrocar a la presidenta supuestamente promovidos por grupos conservadores.
Morales sostuvo hoy que los golpes de Estado "militares y civiles" han sido usados por "el imperio norteamericano y las potencias" para "dominar" a los países latinoamericanos.
"Esa es la historia de América Latina y el mundo, las oligarquías siempre tratarán de conspirar (contra) la liberación de nuestros pueblos", manifestó.
Según el mandatario boliviano, el continente ya no está "en tiempos de oligarquías, ni jerarquías, ni monarquías" y expresó su confianza en que la supuesta alerta de un golpe de Estado militar en Brasil "sea solamente una cuestión mediática"/ EFE
2015-08-21