AP
La cantidad de latinoamericanos y caribeños que padecen hambre aumentó 6 % en 2016 respecto del año anterior para ubicarse en 42,5 millones de personas y la región tendrá problemas para cumplir su meta de erradicar el hambre en 2030 si continúa esta tendencia, se informó el martes.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtieron en un informe conjunto los indicios de un deterioro de la situación en Sudamérica, donde el hambre creció de 5% en 2015 a 5,6% en 2016.
Venezuela fue el país del continente que experimentó la mayor alza en subalimentación, al aportar 1,3 millón de los 1,5 millón de nuevas personas con hambre en Sudamérica entre 2014 y 2016 respecto del bienio previo.
La nación caribeña -cuya economía habrá sufrido una abismal contracción acumulada de 44,6% entre 2014 y 2018 según el Fondo Monetario Internacional- fue uno de los seis países en los que aumentó la proporción de personas subalimentadas, mientras que otros 21 países la redujeron.
Haití fue el país de la región con una mayor proporción de subalimentación, de casi la mitad de su población. Antigua y Barbuda, Bolivia y Granada presentaron tasas de al menos un quinto de sus respectivas poblaciones.
Brasil, Cuba y Uruguay presentan una prevalencia de subalimentación inferior al 2,5%, mientras que Argentina, Barbados, Chile, México y Trinidad y Tobago están por debajo del 5%.
El informe destacó que además de luchar para erradicar la deficiencia alimentaria los gobiernos de la región también necesitan concentrarse en el sobrepeso y la obesidad.
Todos los países del continente han incrementado sus tasas de obesidad en adultos entre 1980 y 2014 y en al menos 24 naciones los obesos superan el 20% de la población.
2017-10-11