AVN
La oleada de frío que comenzó en Honduras el pasado 7 de enero deja cuatro personas fallecidas, seis desaparecidos y alrededor de 700 afectados a causa de este fenómeno.
Luego de declarar el pasado lunes a las regiones Cortés, Colón, Atlántida, Yoro e Islas de la Bahía y Gracias a Dios en alerta amarilla (de prevención) debido a las fuertes precipitaciones, inundaciones y bajas temperaturas, el martes autoridades anunciaron reducir el nivel de alerta a verde (de vigilancia) a causa de la disminución de lluvias, refiere Efe.
Dicho medio reseña, que según un análisis del Centro de Estudios Atmosférico, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) y de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), el clima ha empezado a mejorar desde el pasado sábado debido a que el temporal se aleja de ese territorio.
Pese a la disminución de alerta, los organismos de protección civil se mantendrán por 24 horas en alerta ante el alterado oleaje en el litoral Caribe hondureño, señaló la Copeco.
Además solicitó a las organizaciones de emergencia municipal y local a continuar en vigilancia en las zonas más vulnerables a deslizamientos de tierras, y exhortó a las embarcaciones a "tomar precauciones" a la hora de la navegación.
Por su parte, el pronosticador de turno de Cenaos, Walter Aguilar, informó que este miércoles la ola de frío se mantendrá afectando al territorio, específicamente generando precipitaciones de leves a moderadas en las zonas Insular, Colón y La Mosquitia y que en el resto del país la temperatura se mantendrá fresca, reseñó Tiempo Digital.
Las abundantes precipitaciones y fuertes vientos registrados estos días, también han causado daños en el sistema eléctrico e inundaciones en unas 137 viviendas, refiere La Prensa.
2017-01-11