EFE
El Gobierno iraquí prometió hoy aumentar sus castigos y esfuerzos contra el terrorismo tras el atentado suicida que ayer, domingo, causó en Bagdad al menos 180 muertos y 230 heridos, en medio de un ambiente de rabia contra la supuesta negligencia de las fuerzas de seguridad en ese ataque.
Como represalia a ese ataque, las autoridades ejecutaron hoy a cinco condenados a muerte por terrorismo, horas después de haber anunciado que aplicarían esas penas muy pronto, según informaron dos comunicados del ministerio.
La nota sobre las ejecuciones señaló que el departamento gubernamental ha presentado un proyecto de remodelación del código penal con el fin de acelerar la aplicación de las penas de muerte.
Con ello, el ministerio pretende reducir a un mes el plazo máximo que tiene el presidente iraquí para confirmar las penas capitales tras el fallo definitivo.
El ministerio pretende además que, pasado ese mes, si no hay respuesta del mandatario, se considere como una confirmación de la pena.
2016-07-04