EFE
El Gobierno de Guyana reiteró hoy su posición sobre el conflicto fronterizo con Venezuela y acusó a ese Gobierno de tratar de "enmascarar" la ilegalidad de sus acciones cuando habla de su voluntad de resolver pacíficamente esta controversia.
La reacción del país suramericano surgió después de que el Ministerio de Exteriores de Venezuela saludara las declaraciones del canciller guyanés, Carl Greenidge, en las este se remitía al acuerdo de Ginebra de 1966 para la resolución del conflicto territorial que mantienen ambas naciones.
El Gobierno de Guyana explicó que la raíz del problema es la reclamación de Venezuela de que se anule el laudo arbitral de 1899 que establació la actual frontera entre ambos países.
Además, aclaró que lo que Greenidge dijo esta semana es que esta petición es la que se debe resolver conforme a los procedimientos previstos en el Acuerdo de Ginebra.
Ese acuerdo de 1966 fue el resultado de la denuncia de Venezuela del laudo arbitral ante Naciones Unidas y se limitaba a establecer la conformación de una comisión mixta para resolver la controversia.
"Guyana no ha tomado ninguna decisión reciente o nueva para respetar el Acuerdo de Ginebra", tal y como dijo Venezuela. "Siempre ha dicho que lo haría y, de hecho, siempre lo ha hecho", pero "ese acuerdo no prevé ninguna anexión unilateral de ninguna parte de Guyana, incluyendo el Essequibo, por parte de Venezuela", dijo la Cancillería de Guyana en un comunicado.
Por ello, defendió que las recientes declaraciones de la Cancillería venezolana "meramente pretenden enmascarar la acción ilegal de Venezuela".
"Esperamos que se unan en nuestra aproximación al secretario general de la ONU, en el marco del Acuerdo de Ginebra, para llegar a un arreglo judicial de su cuestionamiento de la validez del laudo de 1899″, añadió.
Afirmó que "Guyana nunca se ha desviado del camino de la amistad con Venezuela" y apuntó que mantenerse en esta línea, respetando el debido proceso de la ley internacional en la forma propuesta por Guyana, "será un regalo para las futuras generaciones de ambos países."
La controversia es sobre un área de unos 160.000 kilómetros cuadrados, lo que supone unas tres cuartas partes del territorio guyanés y convierte a este conflicto en la mayor disputa territorial del continente.
Venezuela lleva décadas reclamando ese terreno, rico en recursos naturales y sobre todo en petróleo, y recientemente firmó un decreto en el que, según Guyana, modificó sus fronteras marítimas para incluir esa zona en disputa, donde recientemente un consorcio de empresas liderado por Exxon Mobil descubrió un importante yacimiento de petróleo.
Guyana dijo que el decreto es una "violación flagrante del derecho internacional y es incompatible con el principio de que todos los Estados deben respetar la soberanía y la integridad territorial de otros Estados, grandes o pequeños".
"Guyana rechaza esta ilegalidad que busca socavar nuestros esfuerzos de desarrollo a través de la explotación de nuestros recursos naturales fuera de la costa", apuntó la Cancillería, que dijo que continuará permitiendo la exploración petrolífera que lleva a cabo Exxon Mobil.
Venezuela se opone y dice que no se tendría que haber permitido tal exploración en un territorio en disputa.