Más de 7.000 hectáreas han resultado calcinadas y seis personas heridas durante el incendio declarado el pasado miércoles en California (EE.UU.), cuya situación se espera mejore el fin de semana, indicó el Departamento de Bomberos estatal.
El gobernador de California, Jerry Brown, ha declarado estado de emergencia en la zona, y más de 1.600 efectivos de bomberos trabajan en las labores de extinción.
A primera hora del viernes, las llamas se encontraban controladas en un 25 %, mientras continuaban su recorrido hacia el este, en dirección a Palm Springs.
Las previsiones del Servicio Meteorológico Nacional pronostican una reducción de los vientos durante el fin de semana, por lo que se considera que el incendio pueda estar controlado para el lunes.
El fuego, cuyas causas aún se desconocen, se inició el pasado miércoles en el condado de Riverside, unos 145 kilómetros al este de Los Ángeles, cerca de las colinas de San Jacinto.
Por el momento, cerca de treinta viviendas ha sido destruidas en las comunidades de Cabazon, Poppet Flats, Silennt Valley y Twin Pines.
No obstante, las autoridades han permitido a los más de 1.500 evacuados que regresen a sus casas si así lo desean. /EFE
Sábado, 10/08/2013