Las autoridades israelíes decidieron aplicar un nuevo confinamiento, el tercero desde el comienzo de la pandemia. Entrará en vigor el próximo domingo 27 de diciembre, informaron hoy medios locales.
El nuevo cierre general se extendería por al menos dos semanas y pretende detener la propagación del virus. Desde hace más de un mes aumenta de forma incesante y ya registra índices de positivos por encima del 4 %.
La decisión, acordada por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el ministro de Defensa y líder de la segunda formación más importante del Ejecutivo, Beny Gantz, debe aún ser ratificada por el Gobierno, que se encuentra desde hoy en funciones, tras disolverse ayer el Parlamento por una crisis política.
Las medidas prevén un límite de movimiento de un kilómetro en torno a la vivienda, y el cierre de los comercios no esenciales.
Según el digital local Ynet, estará prohibido además visitar residencias de otras personas y se permitirán reuniones de hasta 10 personas en espacios cerrados y de hasta 20 al aire libre.
El sistema educativo seguirá funcionando aunque de manera parcial: solo niños de entre seis y diez años y de entre 16 y 17 seguirán asistiendo a clase, en un horario limitado entre las 08.00 y las 13.00.
Estas medidas regirán inicialmente dos semanas y podrían extenderse otras dos en caso de que no se logre reducir la cifra de contagios diarios a menos de mil o la tasa de reproducción a menos de 1.
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